La muerte de dos obreros eleva a ocho los fallecidos en accidentes laborales en 12 días

Un trabajador de 45 años falleció anoche ahogado mientras realizaba tareas de limpieza en un estanque de un campo de golf del municipio madrileño de Valdeolmos, según ha informado esta mañana Emergencias 112. Además, un inmigrante de 32 años, al que ayer le cayó una barra de hierro en la cabeza cuando trabajaba en la construcción de un edificio en San Lorenzo de El Escorial, ha fallecido a causa de sus heridas en el Hospital Doce de Octubre, según han confirmado fuentes de este centro médico. Estas dos muertes elevan a ocho los fallecidos en accidentes laborales en apenas dos semanas en la Comunidad de Madrid. Ayer hubo, además, otros dos siniestros graves.

En cuando al primer suceso, una llamada realizada a las 23.15 horas de ayer alertó al centro de Emergencias 112 de que un trabajador había desaparecido y que podría encontrarse en el interior de un estanque del campo de golf El Retamar, ubicado en la urbanización Miraval de Valdeolmos. La víctima y un compañero acudieron al campo por la mañana para realizar a lo largo del día tareas de limpieza y arreglar una tubería del estanque. Según ha relatado su propio compañero, el fallecido se quedó solo en el lugar del suceso en torno a las 19.30 -última vez que se le vio con vida-, ya que él se marchó con intención de volver a recogerle más tarde.

Sin embargo, cuando volvió, sobre las 21.30, no encontró a su compañero, aunque continuaban en el lugar su coche y el material de trabajo. Después de buscarle sin éxito por distintos lugares, se produjo la llamada de auxilio. Al lugar se desplazaron miembros de la Guardia Civil, bomberos de la Comunidad de Madrid y una UVI móvil del SUMMA. Los bomberos entraron en el estanque -con 9.000 metros cúbicos de capacidad y cinco metros de profundidad máxima- que había sido parcialmente vaciado, ayudados por cuerdas debido al riesgo que suponía para ellos introducirse en el estanque, cuyas paredes son inclinadas y en el que había mucho fango.

El cuerpo del fallecido fue rescatado también con la ayuda de cuerdas y, a falta del resultado de la autopsia, se cree que pudo morir por ahogamiento. Por otro lado, el inmigrante al que ayer le cayó una barra de hierro en la cabeza de unos cinco centímetros de ancho cuando trabajaba en la construcción de un edificio en San Lorenzo de El Escorial, ha fallecido en el Hospital Doce de Octubre.

La barra de hierro, de unos cinco centímetros de ancho, se desprendió hacia las 12.13 horas desde unos cinco metros de altura en las obras de construcción de un edificio situado en el número 11 de la calle de Timoteo Prados. El obrero, de 32 años y que procede del Este de Europa, tuvo que ser rescatado por los bomberos de un patio al que cayó tras el accidente y fue trasladado al hospital con traumatismo craneoencefálico severo, pérdida de masa encefálica y fractura craneal.

Éste fue uno de los tres siniestros laborales graves que se registraron ayer en apenas tres horas. En sendos accidentes, otros dos trabajadores tuvieron que ser ingresados en el hospital: uno en Madrid capital -un empleado de 52 años herido muy grave - y el otro en Coslada -un joven de 25 años con pronóstico moderado y que se rompió las piernas al caer de una nave desde una altura de cuatro metros de altura-. Las muertes de hoy elevan a 57 el número de fallecidos en accidente laboral en lo que va de año en la región de Madrid, según CC OO, que ha destacado que ocho de ellos se han producido en los últimos 12 días. Cinco de los fallecidos son inmigrantes y cuatro tenían menos de 30 años.