El enfado de Eric Clapton

El único concierto de Eric Clapton en Nueva Zelanda ha estado a punto de suspenderse por el enfado del legendario guitarrista tras comprobar que los organizadores del acto, una conocida marca de vinos, habían puesto a la venta botellas con su nombre. Desde hace años Clapton se encuentra recuperado de su adicción al alcohol y a las drogas, que le llevaron a ingresar en diversos centros de desintoxicación.

Al parecer, Clapton, según informan hoy la mayoría de los diarios neozelandeses, amenazó con no subir al escenario si Mission Estate Winery no retiraba las botellas de vino comercializadas en el recinto donde se iba a celebrar el concierto, en la bahía Hawke, en la ciudad de Napier.

El incidente se resolvió una vez que la empresa, la más antigua de Nueva Zelanda en cuestión de vinos, cediera a los deseos de Clapton. Los promotores no han ocultado su "frustración" por la actitud del autor de Layla, y han recordado que ese tipo de etiquetado es una práctica común de Mission Estate Winery desde que en 1993 comenzó a organizar conciertos de artistas como Rod Stewart, Ray Charles o la soprano neozelandesa Kiri Te Kenawa.

Ajenos a lo ocurrido permanecieron los más de 20.000 espectadores que el pasado sábado disfrutaron de la música de Clapton, quien, a sus 61 años, completó con esta actuación su recorrido por Asia y Oceanía dentro de la gira mundial iniciada el pasado año.