Localizado el "punto central" de la explosión donde estaban los desaparecidos

El ministro del Interior, Alfredo Pérez Rubalcaba, ha afirmado esta tarde en rueda de prensa que los bomberos y las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado han encontrado ya el "punto central" de la explosión del pasado sábado en el aeropuerto de Barajas, aunque aún no han sido localizados ni los vehículos de los dos ciudadanos de nacionalidad ecuatoriana que siguen desaparecidos ni la furgoneta bomba de ETA, por lo que de momento se desconoce tanto la cantidad como el tipo de explosivo utilizado por los terroristas.

Rubalcaba ha señalado además que los etarras avisaron de la colocación de la furgoneta bomba desde un móvil que nunca había sido utilizado con anterioridad y desde una cabina telefónica de San Sebastián. Desde el telefóno móvil los terroristas llamaron a la Asociación de Ayuda en Carretera (DYA) y a los bomberos de Madrid.

Respecto a la versión dada por el joven de Oñate (Guipúzcoa) que ha declarado que tres etarras le sustrajeron la furgoneta en Francia y le mantuvieron retenido durante tres días, Rubalcaba ha indicado que las Fuerzas de Seguridad entienden que este testimonio es "verosímil". También ha explicado que la furgoneta fue introducida en el parking de Barajas el día 29 a las 18.51 y que la policía continúa visionando las grabaciones de las cámaras del aparcamiento. Asimismo, el ministro ha dado cuenta de los operaciones de desescombro que se realizan: ya se han retirado más de 2.000 toneladas de restos y unos 120 vehículos han sido identificados.

Posibilidades "muy, muy, muy remotas"

El director general de la Policía y de la Guardia Civil, Joan Mesquida, ha precisado a primera hora de esta tarde que "se trabaja muy cerca del lugar donde podría estar uno" de los desaparecidos, según "las informaciones aportadas por los familiares". El responsable policial ha admitido que las posibilidades de que se encuentren aún con vida son "muy, muy, muy remotas", ya que se desplomaron cuatro plantas del aparcamiento y hay un "peso importante" de escombros. Además, en el momento de la deflagración se alcanzó una temperatura de más de 1.000 grados. Los familiares de los desaparecidos están en un hotel cercano al lugar del atentado atendidos por psicólogos del SAMUR y de Protección Civil para soportar esta tensa espera.

Desde la zona afectada, el alcalde de Madrid, Alberto Ruiz-Gallardón, ha subrayado esta mañana que se avanza al "máximo ritmo posible con los dos objetivos de encontrar a los desaparecidos y localizar la furgoneta sin destruir pruebas". Ruiz-Gallardón ha declarado que los destrozos "son impresionantes", que no se puede acelerar el ritmo de trabajo y que hay que "esmerarse para no destruir pruebas que puedan ser útiles para determinar el tipo de explosivo utilizado y otros factores necesarios para la investigación del atentado".

El alcalde madrileño ha resaltado que la prioridad es también localizar a los dos desaparecidos, aunque cuanto más tiempo transcurre menos posibilidades hay de éxito en las operaciones, que ha calificado de "muy complejas". Los trabajos de desescombro los desarrollan ininterrumpidamente dos dotaciones de Bomberos del Ayuntamiento, con 18 efectivos, en coordinación con la Policía Científica, que es la que establece los ritmos y procedimientos.

Abiertos los módulos A, B y F del aparcamiento

La mayoría de los 32 vehículos retirados del módulo D están en mal estado y prácticamente son irrecuperables. También se han retirado 25 vehículos del módulo C, colindante con el módulo D, por la caída de una pared que provocó daños en los coches por cascotes y que son recuperables para seguir circulando. Están abiertos al público los módulos A, B y F del aparcamiento de la T-4 y son gratuitos.

Fuentes de AENA han explicado que los vuelos se desarrollan con normalidad en el aeropuerto de Barajas, donde hoy hay programadas 1.199 operaciones, de las que 684 se realizarán en la Terminal 4. Además, sigue la presentación de reclamaciones de los viajeros que estacionaron sus vehículos en el aparcamiento. En la sala de recogida de equipajes aún permanecen al menos medio centenar de maletas de pasajeros de distintos vuelos del pasado sábado.