Los inmigrantes desembarcarán en Malta y serán acogidos por varios países, según el capitán

La odisea del pesquero español Francisco y Catalina en aguas de la inmigración ilegal parece llegar a su fin. El capitán del barco, José Durá, ha anunciado esta tarde que los 51 inmigrantes que rescató el pasado viernes en una patera en alta mar desembarcarán mañana en Malta tras lograr el visto bueno de las autoridades de La Valeta. Los sin papeles, 45 eritreos, cinco marroquíes y un paquistaní, serán acogidos por varios países europeos y africanos, según un acuerdo cerrado esta tarde por el Gobierno español. De Malta, los clandestinos viajarán a España, país que se encargará de distrubuirlos.

La solución llega cuando los víveres comenzaban a escasear, aunque aún tenían para dos o tres días. "Se ha solucionado todo. Acabo de hablar con la embajadora [española en Malta, Marta Vilardel] y me ha dicho que está todo solucionado. Mañana a mediodía se hará el desembarco en Malta", ha indicado por teléfono a Europa Press desde el barco. Aunque no ha dado detalles sobre en qué consiste la solución, Durá sí ha indicado que hay algunos países "voluntarios" que acogerán a los inmigrantes. El capital de la embarcación ha dicho sentirse "contento" de que estos "días difíciles" terminen ya y ha dicho desconocer si el patrón de su barco pedirá compensaciones económicas por la inactividad forzosa. El pesquero ha tenido unas pérdidas diarias de unos 6.000 euros.

Horas después, fuentes del Ministerio de Asuntos Exteriores han dado por cerrado el asunto y han confirmado que un avión español ha partido ya hacia Malta para hacerse cargo mañana de este grupo de inmigrantes en La Valeta y repartirles por los países de acogida participantes en el acuerdo. Las mismas fuentes han explicado que la operación contará con financiación de la Unión Europea (UE) y sus detalles serán dados a conocer por la Agencia Europea de Fronteras en un comunicado oficial. El ministerio español de Exteriores ha destacado la "implicación plena" de la UE en este acuerdo y recalcó que su contenido refleja los esfuerzos desplegados por el Ejecutivo español en favor de una política migratoria común europea.

Esta mañana, Bernardino León, secretario de Estado de Asuntos Exteriores, ya había indicado en San Lorenzo del Escorial que España estudiaba acoger a algunos de los 51 inmigrantes. "Por encima de todas las consideraciones legales existe la posibilidad de que España acoja a algunos de los inmigrantes", ha dicho León, porque debe primar "el carácter humanitario", informa Francesco Manetto. El secretario de Estado ha precisado que atendiendo exclusivamente a la ley del mar, "Libia en primer lugar y luego Malta deberían" deberían haber acogido a estos inmigrantes. León ha advertido además de la situación en la que se hallan los sin papeles y ha subrayado que los inspectores españoles que anoche estuvieron en el barco han calificado su estado de "preocupante".

Cinco días en 26 metros

De hecho, tres de los subsaharianos han sido trasladados a un hospital de la capital maltesa, La Valeta, según han informado en Palermo fuentes locales italianas. La decisión fue adoptada por los médicos que visitaron ayer el barco español, cuyos tripulantes recogieron el pasado viernes a los inmigrantes en aguas del Mediterráneo de la embarcación en la que navegaban a la deriva, aunque se desconoce qué enfermedad sufren los hospitalizados. Los clandestinos, entre los que se encuentran ocho mujeres y un niño, fueron rescatados el viernes cuando iban a la deriva en alta mar en aguas de Libia por el pesquero Francisco y Catalina, con base en Carboneras (Almería) y de solo 26 metros de eslora.

Después de rescatar a los sin papeles, el pesquero se dirigió al puerto de La Valeta, que es el que estaba más cerca, pero cuando se aproximaba a tierra una patrullera maltesa advirtió al capitán del barco de que las autoridades de Malta no admitían la entrada de los inmigrantes. Y allí sigue cinco días después, anclado a 16 millas de Malta. Todos estos días, el Gobierno maltés ha rechazado hacerse cargo de los inmigrantes y ha insistido en que Madrid debe hacerse cargo de los naúfragos. A pesar de todo lo que están pasando, el segundo patrón del pesquero, Bautista Molina Soler, ha asegurado a la SER en conversación telefónica que la tripulación volvería a recoger a más inmigrantes si los viera a la deriva. "Lo volvería a hacer diez veces", ha dicho.