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Un desprendimiento atrapa a cuatro vehículos en la autopista entre San Sebastián y Bilbao

La carretera ha quedado cortada a la altura del municipio de Deba

Una de las paredes de la autopista A-8, que une San Sebastián y Bilbao, se ha desprendido y ha dejado sepultados a tres coches y un camión. Los ocupantes de los vehículos han sido rescatados ilesos salvo una persona que he resultado heridas leve. El suceso se ha producido a las 7.50 horas en el kilómetro 51,5 entre Zumaia y Deba. La vía ha quedado cortada en ambos sentidos.

El camión atrapado iba cargado con isocianato, sustancia no inflamable ni corrosiva, aunque el departamento vasco de Interior aún no descarta que pueda haber otros turismos atrapados por la gran cantidad de rocas que se han desprendido de una ladera de la montaña entre Zumaia y el alto de Itziar.

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Desprendimiento en la autopista A-8

El derrumbe ha obligado a cortar por completo los dos carriles en dirección a Bilbao y uno en sentido a San Sebastián. La policía ha interrumpido la circulación porque persiste el riesgo de nuevos desprendimientos y ha desviado el tráfico por la Nacional 634.

Riesgo de derrumbe

Dada la fragilidad de la ladera que ha originado el desprendimiento, se considera que los trabajos conllevan un riesgo considerable, por lo que las labores pueden prolongarse durante horas, dado que es necesaria la intervención de personal especializado en el asentamiento del monte.

Por ello, la autopista A-8 seguirá cortada en ambos sentidos y la Ertzaintza desvía el tráfico hacia la carretera nacional N-634 en Zarautz (Guipúzcoa), para desviar el tráfico hacia Vizcaya, y en Itziar, para los vehículos que circulan en sentido hacia San Sebastián.

Uno de los vehículos atrapados en las rocas desprendidas sobre la A-8.
Uno de los vehículos atrapados en las rocas desprendidas sobre la A-8.CNN+
Imagen del camión parcialmente sepultado por el derrumbe de la ladera.
Imagen del camión parcialmente sepultado por el derrumbe de la ladera.CNN+

"Si llego estar unos metros más alante me sepulta"

"Si llego a estar unos metros más alante el desprendimiento me hubiera sepultado". Así de contundente se ha mostrado Joaquín Carrasco, conductor de un camión cisterna que se ha visto afectado por el desprendimiento de toneladas de piedras y tierra en la autopista A-8. Carrasco ha explicado que "así como a los coches los ha desplazado" hacia la izquierda, es decir hacia la mediana, "con lo que pesa el camión no hubiera sido posible un desplazamiento, sino que se me habría acumulado todo encima"

El derrumbe sorprendió al transportista a las 7.50 de la mañana mientras circulaba por el kilómetro 52,5 de la autopista en dirección Bilbao, un recorrido que conoce a la perfección ya que es uno de sus trayectos habituales. El vehículo de Carrasco estaba cargado con isocianato, un producto que se utiliza para hacer poliuretano y sirve como aislante para los frigoríficos, y que debía ser descargado en la empresa guipuzcoana Fagor Electrodomésticos.

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