Zapatero afirma que el triunfo del PSOE abrió una nueva etapa de "paz, ciudadanía y talante"

El primer aniversario de la victoria socialista del 14 de marzo ha propiciado un nuevo enfrentamiento dialéctico entre los dos principales partidos. Desde el PP, su secretario general Ángel Acebes, ha calificado esta mañana a José Luis Rodríguez Zapatero de "presidente insolvente sólo preocupado por transmitir buen rollito". José Blanco, secretario de organización del PSOE, le ha respondido que "el Gobierno ha cambiado el rumbo del país en estos 12 meses". A última hora de la tarde ha entrado en el debate el propio presidente que, en un acto para conmemorar el primer año de Gobierno socialista, ha afirmado que su triunfo abrió una etapa de esperanza basada en "la paz, la ciudadanía y el talante". Según Zapatero, "después de ocho años de derechas, España ha tenido un año de derechos".

Para Acebes, el balance del primer año de Gobierno socialista ha sido "muy pobre" y ha estado caracterizado por un Ejecutivo "inoperante" y un presidente "insolvente", que no gobierna. Además, ha advertido de que su partido hace una oposición "firme y exigente" y que lo será aún más en el futuro. Además, ha vuelto a insistir en la idea de que "sin el 11-M Zapatero no habría ganado". En conferencia de prensa tras la reunión del Comité de Dirección del PP, Acebes ha subrayado que "se necesita tener criterio para gobernar y el presidente no gobierna" y ha asegurado que "se puede estar un año sonriendo y frivolizando" pero lo que España necesita es un presidente que "tome decisiones y defienda sus intereses".

Por contra, el PP ha dedicado el año a hacer oposición "responsable" y sin "poner arena en el engranaje", según el dirigente popular. De hecho, ha lanzado un aviso al Gobierno al decir que, si hasta ahora el estilo de oposición de su partido ha sido "firme y exigente", tras un año de gobierno socialista, "lo va a ser más". Blanco, por su parte, ha afirmado que el Gobierno socialista ha cambiado "el rumbo del país" en sus once primeros meses de gestión y ha demostrado que "cumple lo que promete". Al líder popular, Mariano Rajoy, el secretario de organización socialista le ha dicho que encabeza un partido "cada vez más alejado de la sociedad", para que "deje de buscar excusas y mire al futuro".

"Un Giro de 180 grados"

En una rueda de prensa tras la reunión de la Comisión Permanente del PSOE, Blanco ha afirmado que el Gobierno socialista "escucha, dialoga y acuerda" y ha dado "un giro de 180 grados" con respecto al Ejecutivo anterior, ya que "donde antes había confrontación y crispación ahora hay diálogo y se busca el acuerdo". En su opinión, los españoles no se "sentían cómodos con el neocentralismo del PP" que en sus ocho años de Gobierno "tomaba decisiones contra la mayoría, sin escuchar más que a los adictos y sin respetar a nadie", sino que querían "un Gobierno que entendiera la diversidad como una gran oportunidad y no como un mal a combatir".

Por su parte, Rodríguez Zapatero ha afirmado que la victoria socialista en las pasadas elecciones generales abrió una etapa de esperanza basada en "la paz, la ciudadanía y el talante". "Después de ocho años de derechas hemos tenido un año de derechos", ha subrayado Zapatero durante su intervención en un acto organizado por el PSOE en la Casa de América de Madrid para celebrar su triunfo. El líder del PSOE ha recordado al comienzo de su discurso a las víctimas del 11-M y ha asegurado que la sociedad española "no olvidará nunca" su sufrimiento. "Ni nosotros ni la sociedad española va a olvidar nunca el sufrimiento, las vidas arrebatadas, el dolor de las familias, el deber de apoyarlas, quererlas y ayudarlas. A ese recuerdo nos debemos para siempre", ha subrayado.

Zapatero también ha expresado su gratitud al pueblo español que respaldó su triunfo electoral porque es "para sentirse muy orgulloso". Asimismo, se ha referido a quienes "se sienten representados por la oposición" para transmitirles que su partido "no se siente en oposición" sino que profesa un "profundo sentido democrático" por ellos. El jefe del Ejecutivo ha destacado como logro de su Gobierno la situación internacional de España al afirmar que "hoy está cerca de todos y lejos de nadie en el mundo", al tiempo que ha hecho hincapié en que los españoles "estamos en el corazón de Europa con las mejores condiciones para liderar" una Unión de la paz y del progreso.