Trillo insiste en que desconocía las quejas y asegura que seguirá en su escaño
Zaplana echa en cara a los socialistas que cuando el PP llegó al poder eran "muchos los que reclamaban justicia" por el GAL pero el Gobierno no lo investigó
El ex ministro de Defensa Federico Trillo ha roto hoy ante el pleno del Congreso el silencio que mantenía sobre el accidente del Yak-42 desde hace casi cuatro meses, durante los cuales han arreciado las críticas a su gestión por parte de representantes políticos y de familiares de los 62 militares fallecidos. Antes, el portavoz del PP, Eduardo Zaplana, ha mantenido un agrio debate con Bono en el que ha reprochado la actitud del PSOE respecto al accidente, en comparación con la que tuvo su partido en 1996 con los GAL.
Tras permanecer toda la sesión callado y sentado en su escaño, Trillo ha solicitado la palabra por alusiones al final del debate y ha subrayado que hoy rompía su silencio después de haber pedido disculpas a las familias el pasado 29 de junio. De entrada, ha señalado que "nadie en esta cámara, ni fuera de ella después de las familias, ha sentido más el dolor por esas 62 muertes" que él mismo, un dolor que le acompañará "durante toda la vida". "Tengan por seguro que les hablo de corazón", ha subrayado. Trillo ha asegurado haber sido objeto de "gravísimas acusaciones", entre las que ha citado mentiras, falta de diligencia y contratación de "aviones basura".
Según ha explicado el ex ministro, hasta ahora ha guardado silencio, salvo para pedir disculpas". Sin embargo, Trillo ha considerado que hoy era "la hora y el lugar de la verdad" y ha asegurado que ni él ni al cúpula política del Ministerio de Defensa tomaron la decisión de contratar el avión siniestrado. El ex ministro ha insistido en que la contratación de los aviones "no es una decisión política", sino que está delegada en los mandos militares, al tiempo que ha reiterado que, antes del accidente, nunca conoció las quejas sobre el Yakovlev. Asimismo, ha rechazado que la elección del aparato se hiciera por razones económicas y ha recordado que "quien recomendó no contratar el Tupolev" es la misma persona a la que el Gobierno socialista ascendió a jefe del Ejército, en alusión al teniente general José Antonio García González, antes segundo jefe del Estado Mayor del Ejército de Tierra.
"Qué más quisiera yo"
También ha reclamado que se desmienta "la afirmación calumniosa" sobre una supuesta orden para repatriar cuanto antes los cadáveres de las víctimas. "Quien diga eso es un mentiroso", ha protestado Trillo, para afirmar que ni él ni sus colaboradores sabían que hubiera errores en las identificaciones. "Se han alegado prisas y presiones, pero nadie quería hacer las cosas mal. Qué más quisiera yo que no hubiera habido errores", ha subrayado. En la misma línea, ha defendido el trabajo de los militares desplazados para identificar a las víctimas, recordando que fueron ellos, y no los oficiales turcos, quienes aclararon correctamente la identidad de 30 de los fallecidos. Según Trillo, en todo momento hizo "lo que debía hacer", que a su juicio era "investigar la verdad". Es más, y ante la exigencia de responsabilidades políticas por parte de algunos grupos parlamentarios, ha querido dejar claro que seguirá manteniendo ese objetivo desde su escaño.
Tras cuatro horas y media de debate y después de que el presidente del Congreso, Manuel Marín, levantase la sesión, algunos de los familiares de las víctimas han abandonado la cámara gritándo a Trillo "sinvergüenza" y "deberían expulsarte de España". Los diputados del PP han replicado con gritos a estas acusaciones. Eduardo Madinda, diputado socialista, ha intentado mediar en la trifulca, momento en el que el popular Jorge Fernández Diaz ha preguntado a Madina: "¿Cómo puedes defender a esa gentuza?".
"Los GAL eran crímenes de Estado"
En su intervención tras la comparecencia del ministro, Zaplana ha arremetido contra el PSOE por haber criticado a Trillo cuando desde la oposición y por haber continuado desde el Gobierno con una estrategia dirigida a sembrar "dudas, ira y odio" contra el PP. Además de defender la labor de José María Aznar, ha pedido perdón por los errores "involuntarios" en la identificación de los cadáveres. El portavoz se ha mostrado muy molesto porque los socialistas hayan afirmado sobre este caso que las responsabilidades "no las borra el tiempo ni la salida del Gobierno" y ha llegado a comparar la actitud del Ejecutivo con lo que hizo el PP en 1996 respecto al GAL.
Zaplana ha recordado que entonces eran "muchos los españoles que reclamaban justicia" y que se investigara "con todas las consecuencias" algo que "no era un error, sino una monstruosidad", y sin embargo el PP no lo hizo pese a que los asesinatos de los GAL eran "crímenes de Estado". Zaplana ha preguntado si en "ninguno" de los accidentes ocurridos anteriormente en España hubo ningún "lamentable error o equivocación", y en particular en los ocurridos en Castilla-La Mancha, comunidad que Bono presidió durante 21 años. El portavoz del PP ha llegado a preguntar a los diputados si estaban dispuestos "a que se exhumen los cadáveres" de las víctimas de los muchos accidentes precedentes "para comprobar si corresponden a las personas cuya identidad se les asignó".
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