Bono y Argyros acuerdan evitar "excesos verbales" y dan por cerrada la polémica por el desfile

El ministro de Defensa, José Bono, ha mantenido hoy una reunión con el embajador de Estados Unidos en España, George Argyros, que ha sido calificada por la representación diplomática estadounidense como "muy productiva" y propia de dos "amigos" que comparten "objetivos fundamentales" y desean trabajar juntos para lograrlos. Ambos han acordado evitar "excesos verbales" y consideran ya "agua pasada" la polémica por el desfile militar del pasado domingo en Madrid con motivo de la Fiesta Nacional.

Las fuentes diplomáticas estadounidenses han destacado que el encuentro fue "muy cordial" y que no se entró al detalle en los asuntos tratados. Ambas partes -según las citadas fuentes- han decidido poner fin a "algunos excesos retóricos" que "no han contribuido a crear un ambiente en el que se pueda trabajar" en favor de los intereses comunes de los dos países y han acordado centrarse en el futuro y en lo importante, como la colaboración en Afganistán o la posibilidad de trabajar juntas bajo el paraguas de la resolución 1546 para Irak.

Zapatero no cambiará su opinión sobre Irak

El presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, ha declinado esta mañana pronunciarse sobre las declaraciones del embajador estadounidense, que ayer afirmó que no asistió al desfile de la Hispanidad porque en 2003 el entonces líder de la oposición no se puso de pie ante su bandera.

"No voy a hacer una valoración sobre las declaraciones, ni sobre si determinados métodos son los mas diplomáticos o no, lo único que quiero decir es que no voy a cambiar mis convicciones ni mis decisiones sobre la guerra de Irak", ha declarado el jefe del Ejecutivo en Balatonoszod (Hungría), donde participa en una cumbre de líderes progresistas. El rechazo a la guerra fue el motivo por el que Zapatero no homenajeó en el desfile de 2003 a la bandera estadounidense.

El jefe del Ejecutivo no ha precisado si las declaraciones de Argyros tendrán una respuesta por parte del embajador en Washington, Carlos Westendorp: "El embajador es un gran diplomático y estoy seguro de que va a hacer lo que le corresponde a un embajador, que es fortalecer las buenas relaciones que tenemos más allá de la profunda discrepancia en el tema de Irak y que desde luego mi gobierno va a fomentar con la sociedad norteamericana, con este país y con sus autoridades", ha indicado.

Respecto a las elecciones presidenciales en EE UU, Zapatero ha insistido en que no iba a expresar ninguna preferencia sobre el resultado de las mismas por respeto a la democracia estadounidense. "No haré ningún pronunciamiento ni ninguna campaña a favor de ningún candidato ni en Estados Unidos ni en ningún otro país porque quiero para ellos el mismo respeto que quiero para la democracia en España", ha manifestado.