La Virgen del Rocío recorre la aldea tras el tradicional 'salto de la reja'

La Virgen del Rocío recorre desde primeras horas de la madrugada el casco antiguo de la aldea de El Rocío (Huelva) tras el tradicional salto de la reja, que este año se ha producido a las 3.10 horas. A esa hora ha llegado el estandarte de la hermandad matriz de Almonte, la señal para el comienzo de la procesión, que ha arrancado cuando los almonteños han superado la reja que separa el altar donde se encuentra la imagen y la han sacado a hombros para visitar uno por uno todos los simpecados de las Hermandades rocieras.

A pesar de que la intención de la Hermandad Matriz era retrasar en la medida de lo posible el salto de la reja, llegando incluso a recuperar una antigua tradición como la del rosario itinerante por las calles de la aldea, la impaciencia ha podido con los almonteños y el inicio de la procesión de la Virgen se ha producido incluso antes que en años anteriores.

Una vez fuera del Santuario, la Virgen del Rocío ha iniciado la procesión portada por los almonteños y, rodeada de miles de personas, está visitando al simpecado de cada hermandad, de forma que cuando el paso llega hasta el estandarte el cura párroco le reza una salve y la imagen se desplaza hacia otra hermandad, así hasta completar las 102.

El recorrido de la virgen es el tradicional, en el casco antiguo del Rocío, de manera que las hermandades que tienen su sede en el mismo reciben a la Virgen en su propia casa y el resto se acercan con su Simpecado al recorrido de la procesión. La primera hermandad que visitado la Virgen es la de Huévar, que tiene su sede muy cerca de la Iglesia, y la última hermandad será la de Almonte.

La duración de la procesión suele ser de mas de 12 horas, tras las cuales la imagen entra en la Iglesia donde se coloca en el altar y se reza una salve de despedida. Una vez finalizada la procesión, las hermandades iniciarán el camino de vuelta a sus lugares de origen por las provincias de Huelva, Cádiz y Sevilla. Así, algunas de ellas lo harán ya hoy y otras mañana, con la vista puesta en la romería de año que viene.