Zapatero reta a Rajoy a un debate cara a cara para "interpelar de cerca" las propuestas

El secretario general del PSOE, José Luis Rodríguez Zapatero, ha recordado esta mañana al candidato del PP a La Moncloa, Mariano Rajoy, que en democracia "no se interpela de lejos, sino de cerca", por lo que le ha retado a un debate cara a cara en lugar de lanzarle interrogantes desde los actos públicos del PP.

En un mitin celebrado en Cuenca para presentar a los candidatos del PSOE por las provincias de Castilla-La Mancha al Congreso y al Senado, Zapatero, acompañado entre otros por José Bono, ha explicado que ayer escuchó a Rajoy preguntarle sobre cuál es su modelo de Estado desde un acto que llevó a cabo el PP precisamente en la tierra del candidato socialista, León. Zapatero ha respondido a Rajoy con una sola frase: "En democracia no se interpela de lejos; en democracia se interpela de cerca, así que vamos a un debate". En cuanto a las promesas de Rajoy, Rodríguez Zapatero ha señalado que el PP "no tiene credibilidad" para lanzar compromisos como el de construir 900.000 viviendas protegidas si gana las próximas elecciones.

"¿Ahora que hay elecciones?, ¿ocho años después se acuerdan de los problemas de la vivienda, cuando hemos oído a Cascos decir que la vivienda estaba cara porque los españoles tienen mucho dinero? Señor Rajoy, no tiene credibilidad", ha sentenciado. El líder socialista ha asegurado que esta nueva promesa de Rajoy es "una tomadura de pelo" a los españoles que, además, delata al PP, ya que reconoce implícitamente que su política en esta materia durante su etapa de Gobierno ha sido "un fracaso estrepitoso". Lo mismo ocurre, en opinión del candidato socialista, con el compromiso de poner 34.000 nuevos policías en las calles después de que durante los años de Gobierno del PP "haya descendido el número de agentes en 10.000" y los delitos "hayan crecido un 45%".

"Que nadie discuta por la bandera"

Por otra parte, Rodríguez Zapatero ha reiterado su compromiso de intentar formar Gobierno sólo en el caso de ser el más votado y ha argumentado esa decisión en el deseo de no hacer un Ejecutivo "contra nadie, ni tampoco contra el PP", sino que cuente con la legitimidad necesaria para recomponer diálogos y consensos rotos en los últimos años. Su objetivo es formar un Gobierno "más amable, con un compromiso más intenso, que convoque a la unidad y a la cohesión de los territorios, que defienda con firmeza los intereses nacionales, con diálogo y encuentro con los países europeos, que sea reconocido, no por entregarse a los errores de Bush, sino por liderar la cooperación".

En el plano internacional, Zapatero ha exigido al Gobierno que reconozca públicamente que la guerra en Irak no estuvo motivada por la existencia de armas de destrucción masiva para evitar en el futuro una nueva guerra "injusta". De llegar a La Moncloa, el objetivo prioritario de un Gobierno socialista será "que nadie discuta por la Constitución y por la bandera". En este sentido, ha recordado al PP que "la Constitución no es de nadie porque es de todos; la bandera no es de nadie porque es de todos; la unidad de España no es de nadie porque es de todos".

Zapatero ha advertido a los electores de que sí existen diferencias entre la derecha y la izquierda, sobre todo en cuanto a "valores, en cómo queremos que funcione la sociedad", es decir, en la persecución de la igualdad de oportunidades como meta de la acción política. En este punto, sólo el PSOE se compromete a garantizar "una educación pública de lujo" que incluya "la extensión de la gratuidad de los libros de texto", a no regatear esfuerzos en la lucha contra la precariedad laboral, a frenar la especulación con la vivienda para facilitar el acceso de los ciudadanos a este derecho básico, y a aprobar una ley integral contra violencia de género. "Nos merecemos una España mejor y sabemos cómo hacer una España mejor", ha subrayado.