Zapatero: "La política económica del PP lleva a las familias al mayor endeudamiento de la historia"

El ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro, y el líder de la oposición, José Luis Rodríguez Zapatero, se han enfrascado hoy en el debate de los Presupuestos del Estado. El ministro ha calificado las cuentas para 2004 como "presupuestos bisagras entre ciclos" y ha defendido el déficit cero como la vía para conseguir los objetivos del Gobierno que son, según él, un crecimiento económico superior al de la Unión Europea, crear empleo, reforzar la protección social y mejorar la seguridad y la justicia. Por su parte, Zapatero ha criticado la gestión económica del PP, que "ha hecho descender la productividad y que ha llevado a las familias al mayor endeudamiento de su historia".

Según Montoro, los octavos Presupuestos generales del Gobierno popular y últimos de José María Aznar como presidente del Gobierno, tienen la "misma música, la misma filosofía" que los siete anteriores y pivotan sobre tres ejes: el equilibrio entre ingresos y gastos, la bajada de impuestos, y una "fuerte" inversión en infraestructuras e I+D+i. El ministro ha confirmado además que los pequeños empresarios y autónomos acogidos al sistema de tributación por módulos verán congelados los impuestos que pagan mediante esta fórmula.

A continuación, el titular de Hacienda ha reprochado a la oposición, y en especial al PSOE, su rechazo a la mayoría de las iniciativas presupuestarias del Gobierno sin presentar, según él, un modelo alternativo. "Es normal", ha asegurado Montoro, "que se opongan a las medidas del Gobierno, pero no que ese rechazo no se encuadre en un programa económico". En un tono muy distinto el ministro ha alabado la labor del titular de Economía, Rodrigo Rato, a quien ha ensalzado como el indudable artífice de los logros del Partido Popular.

Caída de la productividad

Ya por la tarde, el secretario general del PSOE ha calificado de "mediocre" el documento presentado por el ministro de Hacienda. Zapatero entiende que se trata de un presupuesto con la sola ambición de perpetuar la política económica del PP, que, pese a estabilizar la deuda pública con la política de déficit cero, ha aumentado enormemente la deuda privada, llevando a las familias españolas al "mayor endeudamiento de la historia", en particular por el aumento del precio de las viviendas.

A juicio de Zapatero, los presupuestos para 2004 son "mediocres" por dos razones: primero, porque están hechos "desde la complacencia" y, segundo, porque no resuelven el problema principal de la economía española: el descenso de la productividad. Zapatero ha puesto cifras a este dato. A la llegada del PP al Gobierno, la productividad subía a un ritmo anual del 1,8%, mientras que ahora está al 0,6%. En opinión de Zapatero, Pese a que organismos económicos internacionales ha alertado repetidas veces a España por esta caída, el Gobierno no se ha preocupado. A ese ritmo, para alcanzar la convergencia con Europa serían necesarios "20 años". El PSOE se compromete a lograr esa convergencia "en la próxima década".

A juicio de Zapatero, la política del Gobierno ha sido la culpable de la caída de la productividad. Por ejemplo, por la "pérdida de peso del sector industrial", que apenas crece, mientras que el de la construcción lo ha hecho hasta suponer un 9% del PIB, "el doble que los países de nuestro entorno". Y ese crecimiento ha sido, según Zapatero, "a golpe de burbuja inmobiliaria, con rentabilidades que superan el 100% que han llevado a nuestras familias al mayor endeudamiento de su historia". "Dicen que les preocupa la deuda pública, pero ¿no les preocupa la deuda privada?, ha preguntado el líder de la oposición.

Zapatero también ha cuestionado que el Gobierno no ha fomentado la inversión en tecnología (tres ministros del ramo con tres planes fracasados, según el líder del PSOE) y no ha mejorado el sistema educativo para que los jóvenes estén más preparados. En el tema de la tecnología, "España está a la cola de Europa en inversión en capital tecnológico". Fruto de esta política es "el despilfarro de recursos y la fuga de cerebros", ante la que el Gobierno no tiene más respuesta que un crecimiento insuficiente. Ante ello, el líder socialista ha prometido un aumento del 27% en la partida correspondiente del presupuesto (I+D) y la "fusión de los ministerios de Ciencia y Tecnología y el de Educación".