Las pruebas de ADN que ligan los crímenes de Coín y Mijas corresponden a un sólo hombre

El descubrimiento de que la saliva hallada en una colilla junto al cadáver de Sonia Carabantes es de la misma persona que la encontrada en un cigarrillo junto al cuerpo de Rocío Wanninkhof amenaza con embrollar aún más el proceso judicial de éste último asesinato. La Fiscalía de Málaga ha avanzado que pedirá el aplazamiento del juicio para que continúen las investigaciones, según informa El Diario Sur. Sin embargo, en el tribunal afirman que no han recibido ninguna noticia al respecto y que el caso sigue adelante. La Cadena Ser ha avanzado hoy que la saliva pertenece a un hombre. Además, según han desvelado fuentes de la investigación a la emisora, el resto de pruebas orgánicas halladas en el lugar del crimen (sangre y piel) pertenecen a esa misma persona.

El cuerpo de Rocío Wanninkhof, de 19 años, fue hallado el 2 de noviembre de 1999 en la localidad malagueña de Mijas, a 30 kilómetros de Coín, dónde fue encontrada muerte Sonia Carabantes, de 17 años. Ambas jóvenes murieron de forma violenta tras ser raptadas cuando estaban a punto de llegar a sus domicilios familiares. Ninguna de las dos sufrió una agresión sexual.

La acusación se tambalea

Dolores Vázquez, una amiga de la familia de Rocío Wanninkhof, fue acusada de la muerte de la joven. Sometida a juicio, fue declarada culpable por un jurado popular, pero el Tribunal Supremo anuló la condena y obligó a repetir el juicio al entender que la sentencia no estaba debidamente motivada.

Las nuevas pruebas halladas en Coín han impulsado a la Fiscalía de Málaga a solicitar que se paralice la repetición del juicio por el caso Wanninkhof, prevista para el 14 de octubre. El Ministerio Publico se dirigirá para ello al magistrado que debe presidir el proceso, José María Muñoz Caparrós —presidente de la Sección 2ª de la Audiencia Provincial— para que éste tome la decisión. La Fiscalía ha admitido además que las nuevas pruebas hacen tambalearse la acusación contra Dolores Vázquez, a la que siempre había señalado como autora material de la muerte de Wanninkhof, aunque no prueban que no estuviera implicada en ambos crímenes.

En cualquier caso, al Tribunal de Jurado de la Audiencia Provincial de Málaga no ha llegado todavía noticia alguna de esta petición para paralizar el proceso, por lo que la fecha del 14 de octubre sigue en pie, a la espera de que Muñoz Caparrós, aún de vacaciones, se pronuncie.