Las claves del proyecto soberanista de Ibarretxe

El texto articulado que recoge el contenido del llamado plan Ibarretxe de libre asociación con España prevé, a su entrada en vigor, la derogación del Estatuto de Gernika, que regula actualmente la autonomía del País Vasco. El diario ABC -y otros medios del Grupo Vocento- publica hoy el contenido del texto articulado, titulado Estatuto político de la Comunidad Libre Asociada de Euskadi, en el que se detallan los objetivos y pasos a seguir para la implantación del plan, que el lehendakari presentará al Parlamento vasco en septiembre.

Según ABC, el texto, organizado en 69 artículos, basa la "creación de una nueva entidad política" en el derecho de autodeterminación, aprobado por el parlamento vasco en 1990, "que tiene el pueblo vasco a decidir libre y democráticamente nuestro estatus político, económico, social y cultural, así como el marco de relaciones que queremos tener". El territorio al que hace alusión son las tres provincias vascas, más navarras y los tres territorios vasco-franceses, aunque precisa que el plan sólo sería de aplicación en los territorios "del Estado español".

Los pasos a seguir para la entrada en vigor del nuevo Estatuto comenzarían con una iniciativa presentada al Parlamento vasco por el Gobierno de Vitoria, por un quinto de los componentes del Parlamento o por las "Cortes Generales del Estado Español". La iniciativa deberá ser aprobada por mayoría absoluta en la Cámara vasca y, una vez pasado este trámite, "se iniciaría un proceso de negociación con el Gobierno Español", que no deberá ser superior a cinco meses. Una vez alcanzado el acuerdo, se someterá a la aprobación de las Cortes Generales y, después, a un referéndum convocado por el Gobierno vasco. No obstante, el Ejecutivo de Ibarretxe se reserva el derecho a promover la consulta de todas formas si no se obtiene acuerdo con el Gobierno central en esos cinco meses.

El texto menciona expresamente la posibilidad de segregación del Estado español "en el supuesto de que los ciudadanos vascos, en ejercicio democrático de su libre decisión, manifestaran su voluntad clara e inequívoca de proceder a la segregación", en cuyo caso, "las instituciones vascas y españolas se entenderán comprometidas a garantizar un proceso de negociación interno y externo para establecer de común acuerdo las condiciones de la misma".

Una vez aprobado el nuevo Estatuto, el texto prevé un plazo de seis meses para que "la Comunidad Libre Asociada de Euskadi asuma materialmente y comience a ejercer en plenitud todas las potestades, funciones y servicios sin excepción que le corresponden por su régimen de Autogobierno". En esos seis meses, el Estado español y el Vasco deberán llegar a los acuerdos necesarios, pero, una vez más, la falta de acuerdo "no impedirá que la Comunidad Libre Asociada de Euskadi el ejercicio de las atribuciones o competencias asumidas".

El proyecto redactado que reproduce ABC también contempla la "nacionalidad vasca, compatible con la española" y ambas oficiales. Así, los "nacionales" vascos disfrutarán de los mismos derechos que los españoles, si bien se prevé la redacción de una "Carta Fundamental de Derechos y Deberes Civiles y Políticos". Asimismo, el Parlamento del nuevo ente se reserva el "régimen de creación reconocimiento, organización y extinción de partidos políticos, sindicatos de trabajadores y asociaciones empresariales". La Justicia estará culminada por el "Tribunal Superior de Justicia de Euskadi" y los parlamentarios de su Cámara estarán aforados ante cualquier delito que cometan fuera de la Comunidad. También prevé su propio Consejo del Poder Judicial.

En el ámbito económico, la nueva Comunidad se reserva la competencia normativa sobre el tema socio-laboral y la Seguridad Social (recaudará las cotizaciones y las gestionará).