Aznar zanja la crisis desatada en el partido tras las críticas de Cascos

El presidente del Gobierno, José María Aznar, ha querido zanjar la polémica suscitada en torno a las críticas vertidas por el ministro de Fomento, Francisco Alvárez Cascos, sobre la idoneidad de utilizar encuestas para la elección un candidato a la alcaldía de Madrid. Aznar ha señalado desde Calgary, donde ha asistido a la reunión del G-8, que el PP tiene sus propios procedimientos regulados por los estatutos del partido para la designación de sus candidatos "y no los va a cambiar ahora, ni para el candidato a la Presidencia ni para los demás candidatos".

Aunque el líder de los populares ha asegurado que habrá que tener en cuenta todas las ideas, ha insistido en restar trascendencia a la polémica suscitada en el seno del partido tras las declaraciones de Cascos.

El nerviosismo por la falta de un candidato para las elecciones municipales de Madrid fue puesto ayer en evidencia por las críticas del ministro de Fomento al secretario general del PP, Javier Arenas. Cascos expresó su rechazo absoluto a la realización de sondeos para fijar un candidato, un método que calificó de "error".

Cascos, anterior secretario general del Partido Popular, culpó a Arenas de provocar la crisis. "Decir que yo agito las tranquilas aguas de mi partido me parece que es contar la historia al revés. Las tranquilas aguas se han agitado cuando se han divulgado las encuestas, y tengo que volver a recordar que jamás se habían divulgado antes, porque es regalarle el trabajo a los demás". Sin embargo, desde el partido se asegura que aún no ha trascendido ningún dato de esa encuesta.

Arenas no ha querido entrar directamente en la polémica y se limitó a pedir a través de su portavoz "prudencia" a Cascos.