La Ertzaintza desactiva dos paquetes explosivos en San Sebastián
Una llamada anónima ha alertado de la colocación de los artefactos
Según el departamento de Interior del Gobierno Vasco, sobre las 00.15 horas un comunicante, que dijo hablar en nombre de ETA, avisó a la asociación de ayuda en carretera DYA de que iban a estallar dos artefactos en las sucursales del Banco Guipuzcoano en la calle Zubieta y en la Avenida de la Libertad.
En ambos casos agentes de la Unidad de Desactivación de Explosivos de la Ertzaintza (UDE) se desplazaron hasta las oficinas de esta entidad bancaria y procedieron a acordonar la zona y a recomendar por megafonía a los vecinos que bajasen las persianas y abriesen las ventanas de sus casas.
Hacia las 3.00 horas la UDE desactivó el explosivo, unos dos kilos de dinamita Titadine, similar a la sustraída por ETA en Francia, colocados en una bolsa en la Avenida de la Libertad.
La explosión controlada, que no provocó heridos, causó daños en el acceso a la sucursal, en un establecimiento y en algunos de los vehículos aparcados junto a la oficina.
La sede del banco, en el número 21 de la Avenida de la Libertad (Askatasunaren Hiribidea) esquina a la calle de Fuenterrabía, está en pleno centro de San Sebastián, ciudad que estos días celebra las fiestas de la Semana Grande.
El segundo artefacto, también con dos kilos de Titadine, estaba colocado en la calle Zubieta y pudo ser desactivado sin tener que proceder a explosionarlo por lo que no se produjeron desperfectos.
Ésta no es la primera vez que el Banco Guipuzcoano es blanco de un atentado. El pasado 21 de junio ETA colocó a las puertas de la sede operativa del Banco Guipuzcoano en San Sebastián, un coche bomba cargado con entre 20 y 25 kilos de Titadine.
La explosión causó importantes daños en la fachada del edificio, pero no víctimas. Dos llamadas al diario Gara y a la Asociación de Ayuda en Carretera (DYA) avisando del emplazamiento de la bomba permitió desalojar a los empleados del edificio.
