Marcos dice en el Zócalo que no habrá olvido ni derrota para los indígenas
El 'subcomandante' y sus compañeros zapatistas son aclamados en la capital mexicana por decenas de miles de personas
"Los de arriba saben pero no quieren decirlo que no habrá ya olvido y que no será la derrota la corona para el color de la tierra. No quieren decirlo porque eso es reconocerlo y reconocerlo es ver que todo ha cambiado", ha declarado el líder del Ejército Zapatista de Liberación Nacional (EZLN).
Marcos, quien ha sido interrumpido en diversas ocasiones por aplausos y vítores de las decenas de miles de personas que llenaron el Zócalo, ha asegurado que el EZLN no será "una moda pasajera o el taimado cálculo que finge la palabra".
"No somos la paz simulada que anhela guerra eterna", ha dicho el subcomandante, "no aspiramos a tomar el poder ni somos quienes ponen precio a la dignidad propia y ajena".
El Sub, como se conoce popularmente al líder rebelde, ha hecho alusión al hecho de que el escenario desde donde han hablado los zapatistas estaba situado de espaldas al Palacio Nacional. "Hoy, como otras veces, el Gobierno está detrás de nosotros, a veces con helicópteros, paramilitares, bombarderos o policías, a veces como hoy con silencios, por eso no nos ve el Gobierno, no nos escucha", ha declarado.
"Nosotros no deberíamos estar aquí, después de escuchar esto estoy seguro de que, por primera vez, el que está detrás de mi [el presidente Vicente Fox] está aplaudiendo a rabiar", ha comentado Marcos al asegurar que las que deberían estar en la capital son las comunidades indígenas y las bases de apoyo del EZLN.
"No somos la realidad sino apenas su reflejo, no somos la luz sino apenas un destello", ha dicho el subcomandante, quien ha pronunciado un discurso poético y lleno de metáforas en el que ha habido una mención especial para cada una de las 56 etnias de México.
Antes de concluir su intervención, esperada durante horas por miles de personas, Marcos ha solicitado el apoyo de todo los mexicanos a la lucha zapatista porque "es hora de que el país deje de ser una vergüenza donde manda el color del dinero".
"México, no venimos a decirte qué hacer, venimos a pedirte humildemente que nos ayudes. No permitas que vuelva a amanecer hasta que la bandera tenga un lugar para todos nosotros", ha manifestado.
"Podemos ser con o sin rostro, armados o no con fuego, pero zapatistas somos y siempre seremos, rebeldes somos y siempre seremos", ha sido su conclusión.
Fuentes de Protección Civil de Ciudad de México han informado de que 275 personas han tenido que ser atendidas durante el mitin del Zócalo por dolencias leves como desmayos o insolaciones.
El acto, con el que ha concluido oficialmente la marcha de 3.000 kilómetros que empezó en Chiapas, se ha desarrollado sin incidentes destacados, aunque en los alrededores del escenario donde se encontraban los dirigentes del EZLN se han producido momentos de tensión entre la llamada sociedad civil, encargada de la seguridad, y los periodistas que intentaban acercarse.
Ninguna de las cadenas de televisión de México ha transmitido el mitin del EZLN, pese a que el pasado día 3 los principales canales del país, Televisa y TV Azteca, organizaron un multitudinario concierto por la paz en Chiapas.
En el barrio sureño de la capital Xochimilco, la última parada antes de la entrada en Ciudad de México, Marcos aprovechó su discurso para arremeter duramente contra "el poder empresarial y la derecha política, que asustados ante el poder del color de la tierra [los indígenas], se refugian en sus fortalezas y desde ahí, derrochan no su dinero sino su estupidez y torpeza".
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