Mercadona, Dia, Carrefour o El Corte Inglés abren con “normalidad” y la industria alimentaria hace balance de daños
La distribución habla de una normalización de la actividad con incidentes puntuales. Los generadores marcaron la diferencia el lunes entre los operadores


Los principales grupos de supermercados y distribución constatan este martes una recuperación de su actividad, una vez superado el apagón del lunes que provocó una paralización prácticamente generalizada de la misma. “La práctica totalidad de las tiendas han abierto hoy con puntualidad y normalidad”, afirma la principal asociación de la distribución alimentaria, Asedas.
Empresas como Mercadona, El Corte Inglés o Carrefour confirman la apertura de todas sus tiendas desde el inicio del horario comercial. Desde la cadena que preside Juan Roig, la principal por cuota de mercado y ventas a nivel nacional, se habla de una apertura con “normalidad” y con los trabajadores pudiendo acudir a sus puestos de trabajo.
De hecho, los cerca de 1.600 supermercados que tiene Mercadona en España pudieron mantener su operativa durante la crisis de este lunes, ya que todos ellos cuentan con grupos electrógenos. Esto marcó la diferencia entre operadores: aquellos que contaron con este sistema energético de respaldo ante situaciones de caída de la red, como la de ayer, pudieron seguir cobrando o refrigerando los productos mientras el gasoil, con el que se alimenta a estos generadores, lo permitía. Los mismos requieren de una inversión y un espacio que hace poco viable su instalación en todo tipo de locales.
La mayor anomalía, en el caso de Mercadona, fue la gran afluencia de clientela. En algunas tiendas, como la de la calle Fuencarral de Madrid, tuvo que restringirse el acceso por la acumulación de personas, provocando colas. La imagen de los clientes que salían de ella evocaba a las escenas que se vivieron en la pandemia: acaparamiento de papel higiénico, de garrafas de agua y de leche.

El Corte Inglés, que hoy también dice tener operativos todos sus centros y supermercados, mantuvo abiertas las puertas de sus principales grandes almacenes, aunque en el interior de las mismas con una iluminación de mínimos que ahuyentó a la clientela. Con el paso de las horas, el servicio se priorizó a las zonas de supermercados y alimentación.
Desde Carrefour también se habla de normalidad este martes. Fuentes de la compañía indican que los hipermercados pudieron mantener el servicio hasta el cierre, cobrando y manteniendo la cadena del frío. Su red de supermercados Express y Market sí sufrió cierres durante la jornada ayer.
Las tiendas de otras empresas, como Dia, Lidl, Aldi o Alcampo también han reabierto paulatinamente durante la mañana.
Lidl, tercer cadena por cuota de mercado en España, cerró “preventivamente” todas sus tiendas de la Península. En zonas de País Vasco, donde primero se recuperó el suministro, reabrió algunas de ellas. A media mañana de este martes, una veintena de locales de los más de 700 que tienen en España no ha abierto con puntualidad. Además, la empresa refiere algunos problemas en el suministro de productos frescos en ciertas tiendas, pero “su abastecimiento diario ya está garantizado de nuevo”. Dia, por su parte, asegura que se ha retomado toda la actividad en tiendas, servicio online y almacenes, estos últimos “totalmente operativos desde la pasada noche”. “Nuestras tiendas abrirán hoy con total normalidad”, dice la compañía. Eroski también confirma que la operativa de su red “se ha restablecido de manera generalizada y opera con normalidad”
A nivel sectorial, Anged, la patronal de las grandes empresas de la distribución, como El Corte Inglés o Ikea, explica que entre los operadores de alimentación y gran consumo “se registraban pocas incidencias, muy puntuales, en algún centro, por corte de energía o retrasos en entregas de productos” a primera hora de este martes.
Entre los operadores de no alimentación, hay un restrablecimiento “completo” de la actividad, “sin incidencias reportadas”. “La caída de las telecomunicaciones durante buena parte del día de ayer generó las mayores dificultades para coordinar la respuesta”, explica la asociación, desde la que agradecen “la extraordinaria capacidad de nuestras empresas y de todos los profesionales que trabajan en la distribución para garantizar el abastecimiento de productos básicos en todo el territorio, en unas circunstancias muy complejas”.
Tanto distribución como industria alimentaria empiezan ahora a hacer el balance de daños. La principal patronal de esta última, FIAB, no cuantifica aún el impacto causado por el apagón, aunque constata que algunas empresas sufrieron la paralización de sus cadenas de producción, así como la pérdida de productos que necesitaban la conexión eléctrica para su tratamiento y conservación. “El sector ha ido paulatinamente recuperando la normalidad, garantizando la calidad y seguridad de todos sus productos”, se afirma desde la asociación.
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