CC OO y UGT llaman a una huelga en el transporte por carretera para bajar la edad de jubilación

Amenaza de huelga indefinida en el transporte de mercancías y viajeros por carretera ante la ausencia de negociaciones, entre Gobierno y patronales, sobre la largamente demandada rebaja en la edad de jubilación de los conductores profesionales, de los 67 a 60 años, sin tijeretazo en la pensión. Los sindicatos UGT y CC OO han anunciado este lunes la convocatoria de paros de 24 horas para el próximo 28 de octubre, 11 de noviembre, 28 y 29 de noviembre, 5 de diciembre y 9 de diciembre. Pero están dispuestos a ir más lejos: la protesta se convertiría en huelga indefinida a partir de 23 de diciembre si no se dan pasos decididos en las conversaciones. Jaque a la movilidad, las cadenas de suministro y, por extensión, a la economía.

Esta medida de presión, registrada el pasado viernes ante el servicio de mediación SIMA, coincide con fechas clave como el Black Friday, el puente de diciembre o las fiestas navideñas. Los llamados a la movilización son los conductores de transporte de mercancías (vehículos pesados y ligeros), del transportes de viajeros en vehículos de más de nueve plazas, y los de los autobuses urbanos en servicios de titularidad pública. Los dos sindicatos, con una cuota conjunta de representación del 70% en el sector, estiman que solo en lo que respecta al transporte pesado de carga están afectados más de medio millón de profesionales, cifra en la que se incluye a unos 250.000 autónomos. Además, se calcula que hay cerca de 100.000 conductores de autobús. Quedan fuera de esta movilización los taxistas y conductores de VTCs.

Los representantes sindicales han explicado esta mañana en rueda de prensa que su reivindicación central es la del citado anticipo en la edad de salida de los conductores, pero también defienden la jubilación parcial voluntaria por contrato de relevo, en un momento en que las empresas del sector aseguran sufrir un fuerte déficit de personal. Este es cifrado por las asociaciones en más de 14.000 efectivos. El coste extra de las jubilaciones parciales se compensaría, según estimaciones de los sindicatos, con un menor absentismo laboral.

En busca de respaldo entre la ciudadanía, desde las centrales mayoritarias se asevera que la avanzada edad de los conductores se ha convertido en un problema de seguridad vial “que afecta a todos, de niños a mayores”. Y se critica el bloqueo que, a su juicio, están provocando desde hace más de diez años Ejecutivo y patronales para que cristalice una petición ya histórica. Un nuevo cálculo de la edad de jubilación tendría en cuenta la aplicación de coeficientes reductores por penosidad y peligrosidad de la profesión, de los que gozan colectivos como el de los pilotos aéreos y el de los maquinistas ferroviarios.

El pasado mes de junio ya tuvo lugar una concentración por este motivo ante la sede del Ministerio de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones. De hecho, los sindicatos han mantenido contactos, sin fruto alguno hasta el momento, con ese ministerio y con los de Transportes y Trabajo. Con la convocatoria de huelga sobre la mesa, las distintas asociaciones del transporte buscarán llegar en los próximos días a una posición común sobre la jubilación anticipada en el seno del Comité Nacional del Transporte por Carretera (CNTC), que es el interlocutor del sector con el Gobierno.

Siniestralidad

CC OO y UGT aseguran que más de dos tercios de los 120 conductores profesionales que fallecen cada año de media en la carretera superan los 55 años de edad, y se quejan de que esas pérdidas se enmascaren como accidentes de tráfico y no se tengan en cuenta como siniestros laborales. “El factor de la edad es determinante en la siniestralidad. Con esta huelga pretendemos poner fin o minimizar los fallecimientos en el puesto de trabajo”, ha expresado ante los medios el secretario general del Sector de la Carretera y Logística de CC OO, Paco Vegas.

Los convocantes del paro se han mostrado pesimistas sobre una resolución del conflicto en los próximos días, pese a reconocer que “hay margen para la mediación y el acuerdo”, ha señalado Vegas. Y desde UGT ha sido el secretario del Sector de Carretera, Diego Buenestado, quien ha puesto el acento en la falta de un reconocimiento explícito del riesgo de la profesión, por parte de las patronales, a pesar de que los conductores, especialmente los de vehículos pesados, “pagan seis veces más que otros trabajadores en su cotización en lo que se refiere a accidentes de trabajo y enfermedades profesionales”.