Escrivá propone cambios en la ley de autonomía del Banco de España

El nuevo gobernador del Banco de España, Jose Luis Escrivá, ha tratado de disipar este martes cualquier duda sobre su independencia en su primer discurso desde que fuera nombrado por el Gobierno sin acuerdo con el PP. Escrivá fue rechazado por los populares porque daba el salto desde el Ministerio para la Transición Digital y de la Función Pública al organismo supervisor. En su toma de posesión, el exministro ha pronunciado un discurso en el que ha asegurado que durante su mandato habrá un esfuerzo para mejorar la independencia, la transparencia y la rendición de cuentas del organismo supervisor. Para tal fin, ha anunciado la creación de un grupo de trabajo que estudie cambios en la ley de autonomía de la institución.

Escrivá ha querido destacar, en primer lugar, que vuelve a la casa donde empezó su carrera profesional. Y ha recordado su tiempo como presidente de la Autoridad Fiscal (Airef): en aquella época “preservar la independencia de la institución de influencias y condicionantes externos fue, singularmente, un reto desde el primer día, y en eso me sirvió conocer a los gobernadores y subgobernadores desde hace 30 años”, ha declarado.

El nuevo gobernador ha señalado que el Banco de España cumple con unos estándares elevados de independencia porque está incluido en el eurosistema. Y que durante 30 años su ley de autonomía ha servido para preservar esa independencia. Pero ha recalcado que después de tres décadas ha habido cambios muy importantes y que habría que revisitar la ley de autonomía del banco para garantizar su independencia y su transparencia, así como para reducir su déficit democrático. De modo que ha explicado que se creará en el consejo del banco un grupo de trabajo que se encargará de liderar una reflexión sobre las reformas que se precisan. Y ha apuntado que esta comisión será presidida por el consejero Fernando Fernández, nombrado a propuesta del PP. Un hecho que se interpreta como un intento de hacer un guiño a los populares. Sin embargo, horas más tarde y pese a haber aceptado el encargo antes según fuentes del banco, Fernández ha declinado la tarea y lo hará la consejera Lucía Rodríguez, designada por el ministro de Economía, Carlos Cuerpo.

En el mismo sentido de intentar acercarse al PP pueden interpretarse las palabras de reconocimiento que ha dirigido a su predecesor, Pablo Hernández de Cos, cuyas declaraciones y diagnósticos a veces no sentaban bien en el seno del Ejecutivo. Harto conocidas han sido las discrepancias sobre materias como el salario mínimo o las pensiones. Sobre Hernández de Cos, Escrivá ha destacado su intenso trabajo para difundir los análisis del organismo. “El resultado ha sido una innegable mejora del prestigio de nuestra institución, que todos les agradecemos”, ha dicho.

El anterior gobernador, Pablo Hernández de Cos, ha reivindicado en una intervención previa la recuperación del prestigio de la institución durante su mandato. Y ha pedido a Escrivá que trabaje sobre lo construido y mantenga esos valores, deseándole suerte. Por su parte, el nuevo gobernador parece que por ahora ha recogido el guante con un discurso en el que ha hecho hincapié, sobre todo, en la necesidad de que la institución se abra más a la sociedad y gane en transparencia.

Con este mismo espíritu, Escrivá ha resaltado que ha creado una nueva dirección que engloba toda la comunicación y difusión del organismo, como una forma de poner el acento en la transparencia. Y ha señalado que en los últimos años ya ha habido un esfuerzo para mejorar ese aspecto de la cultura institucional del banco. Con la intención de avanzar en este mismo camino, ha adelantado también que la oficina de evaluación interna pasará a ser independiente y solo estará subordinada al consejo de la institución. El gobernador ha indicado que no hay que tener miedo a ser abiertos y publicar, por ejemplo, cómo se realizan las predicciones para aumentar la rendición de cuentas. También ha subrayado la importancia de utilizar más las nuevas tecnologías e incorporar nuevos perfiles a los equipos para enriquecer el análisis.

“El buen funcionamiento de las sociedades democráticas requiere de instituciones imparciales”, ha insistido. Y ha pedido a los trabajadores del organismo que dirige que mantengan su elevado grado de compromiso en esta nueva etapa. Respecto a la plantilla, ha destacado su capital humano y su capacidad de análisis. Si bien hace no mucho Escrivá criticó un estudio del banco sobre las pensiones por “poco sofisticado”. El gobernador ha incidido, por último, en la importancia de la humildad para reconocer errores y limitaciones y para que el Banco de España siga avanzando en ser “una entidad respetada, confiable, imparcial y comprometida con la sociedad”.

El nuevo gobernador se enfrenta a un periodo de bajada de tipos. Y en el Banco Central Europeo se abre un debate sobre la intensidad de esta relajación de la política monetaria. Los gobernadores considerados palomas apuntan a los malos datos de la industria y de países como Alemania, mientras que los halcones alertan del riesgo de que la inflación de servicios no se modere como se prevé debido a las tensiones por la falta de mano de obra. Se espera que Escrivá se posicione en un punto intermedio entre estas dos posiciones.

Al acto asistieron los primeros espadas de las entidades bancarias, entre ellos: Ana Botín, Carlos Torres, José Ignacio Goirigolzarri y Josep Oliu. En medio de la opa, Torres y Oliu departieron en público.