Finetwork apuesta por los patrocinios antes que por una red propia

Finetwork ha deshojado finalmente la margarita. El operador de telecomunicaciones lanzó este verano el mensaje de que quería dar el salto para convertirse en una compañía con red propia, ya que ahora opera a través de la infraestructura de terceros. Pero, finalmente, ha decido enterrar esos planes y apostar decididamente por el marketing como principal arma para conseguir clientes. Los patrocinios, desde la selección de fútbol hasta cantantes como Manu Carrasco, van a seguir siendo el primer sello de identidad de esta firma levantina que presume de haberse convertido en la quinta compañía de telecomunicaciones española por número de clientes.

El primer paso en esta estrategia será la renovación por cinco años más del acuerdo con Vodafone que le permite ofrecer telefonía móvil a sus 900.000 clientes. El acuerdo actual, que vence en abril de 2024, incluye no solo el uso de la red, sino que la operadora británica le brinda toda la operativa técnica de gestión de llamadas (averías incluidas), e incluso la numeración y las tarjetas SIM son suyas, mientras que Finetwork solo aporta la parte comercial (facturación y atención al cliente). Los planes que figuran en el acuerdo que se anunciará próximamente ampliarán las prestaciones al servicio al 5G a medida que Vodafone lo vaya implantando, informaron fuentes del operador. En fibra, también se beneficia del alquiler de la red de Vodafone y otros operadores locales como Onivia.

El nuevo consejero delegado de Finetwork, Óscar Vilda, aprovechó su primera comparecencia ante los medios de comunicación el pasado mes de junio para deslizar el mensaje de que el acuerdo con Vodafone estaba en entredicho y que negociaban con Orange, MásMóvil o Movistar un pacto alternativo. “Al final, se ha demostrado que esa amenaza era solo una estrategia de negociación para conseguir un acuerdo más ventajoso con Vodafone”, señalan fuentes del sector. Vodafone también estaba bajo presión para conservar su mayor acuerdo mayorista, el que le proporciona más ingresos, paliando así la pérdida continuada de clientes y facturación en el segmento residencial. Además, las líneas que arrebata Finetwork por la portabilidad se computan como líneas de Vodafone, lo que maquilla el número de clientes perdidos cada mes por el operador británico.

También se ha quedado en agua de borrajas el anuncio de que Finetwork estaba dispuesta a pujar por los activos de red y de espectro que queden libres a consecuencia de los remedies (condiciones) que la Comisión Europea imponga a Orange y MásMóvil para autorizar su fusión. Vilda dice ahora que los remedies “no van en la línea de lo que a nosotros nos pudiera interesar”, aunque sí se beneficiarían de acuerdos mayoristas ventajosos que imponga la Comisión.

La renuncia a desplegar una red propia aliviará las necesidades financieras de Finetwork, que finalmente no dará entrada a un socio financiero ni industrial, y optará por acudir al mercado tradicional de deuda (bonos) para obtener liquidez. También se descarta completamente los planes iniciales de salir a Bolsa. El 80% de Finetwork es propiedad del empresario alicantino Pascual Pérez, a través de la sociedad Wewi Mobile SL.

De la selección española de fútbol a KOI

El objetivo es distanciarse de la estrategia de otros operadores alternativos como Digi o Avatel, que están tendiendo una red propia selectiva de fibra óptica, y centrarse en los patrocinios como principal motor de captación de clientes. La lista de patrocinios de Finetwork es amplia: selecciones masculina y femenina de baloncesto, Betis, Real Sociedad, KOI (el equipo de eSports de Ibai Llanos y Gerard Piqué) y deportistas como el automovilista Fernando Alonso, Ale Galán (pádel), los pilotos de MotoGP Pedro Acosta y Alonso López o el futbolista del Betis Joaquín. También han asociado su imagen en el plano musical como la gira de los cantantes Alejandro Sanz y Manu Carrasco.

Finetwork saltó a la fama cuando en 2020 anunció un acuerdo con la Real Federación Española de Fútbol para patrocinar a las selecciones españolas absolutas masculina y femenina de fútbol, la selección sub-21 de fútbol, así como de las competiciones Copa del Rey, Copa de la Reina y Supercopa femenina. El acuerdo llamó la atención al tratarse de una marca pequeña en comparación con otros grandes patrocinadores (Iberdrola, Renfe, Iberia, etcétera), pero una vez vencido no fue renovado. Además, la operadora ha protagonizado un conflicto con la Liga F, la primera competición profesional del fútbol femenino, que en los inicios de la temporada pasada presentaba un acuerdo de patrocinio principal (title sponsor, es decir, dar el nombre de la marca al torneo) por tres años de duración y un pago inicial de cuatro millones. Finalmente, el acuerdo no llegó a buen puerto, aunque mientras que la Liga F considera que el pacto es vinculante y reclama la cantidad acordada, Finetwork estima que solo fue un acuerdo de intenciones y no se cumplieron las condiciones para materializar el acuerdo de patrocinio.

Dentro de esa ofensiva de marketing, Finetwork anunciará próximamente una oferta para atraer clientes con un teléfono móvil de regalo y la inauguración de su tienda digital de terminales. El objetivo es alcanzar en octubre el millón de abonados.

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