Hyundai dispara casi un 40% su beneficio en la primera mitad del año y se acerca a los 5.000 millones

El fabricante surcoreano de vehículos Hyundai Motor registró un beneficio neto de 6,77 billones de wones (4.799 millones de euros al cambio actual) en los seis primeros meses de 2023, lo que representa un incremento del 39,3% en la comparativa interanual.

Según datos publicados este miércoles por la multinacional asiática, la facturación semestral se situó en 80,03 billones de wones (56.755 millones de euros), un 20,7% más respecto a los datos del mismo período de 2022. Además, la compañía cerró la primera mitad del ejercicio con un beneficio operativo de 7,8 billones de wones (5.532 millones de euros), lo que se traduce en una progresión del 59%.

En el segundo trimestre, el beneficio neto de la empresa creció un 8,5%, hasta 3,35 billones de wones (2.373 millones de euros), mientras que el beneficio operativo trimestral se impulsó un 42,2%, hasta 4,24 billones de wones (3.006 millones de euros). Entre abril y junio del ejercicio actual, Hyundai Motor registró una cifra de negocio de 42,25 billones de wones (29.967 millones de euros), lo que representa un aumento del 17,4% respecto a dichos meses de 2022.

De cara a final de año, la compañía ha aumentado sus previsiones de crecimiento en los ingresos a un rango entre el 14% y el 15%, superando las expectativas de principios de año que se situaban entre el 10,5% y el 11,5%. Además, también espera un crecimiento del margen operativo anual consolidado de entre el 8% y el 9% motivado por el aumento de las ventas y una mejor combinación de productos, así como tipos de cambio más favorables.

Electrificación

Hyundai es la tercera marca de automóviles más vendida en España. Al cierre de 2022 la facturación de su filial española se había disparado un 21,5%, hasta ingresar 1.131 millones de euros. A nivel global, el grupo Hyundai Motor Company —que también integra la marca Kia— fue el tercer fabricante mundial de coches el año pasado, solo por detrás de Volkswagen y de Toyota.

Con la recuperación del mercado de los semiconductores, que afectó seriamente a la producción de la industria del automóvil en los últimos dos años, ahora el reto de las compañías pasa por la electrificación. De hecho, este mes de abril la compañía surcoreana se lanzó al negocio de las baterías y firmó una alianza con SK On (el quinto mayor proveedor de baterías para vehículos eléctricos en el mundo) para crear una compañía conjunta de producción de baterías.

Con este movimiento, Hyundai se suma a la estrategia que están siguiendo otras compañías como Volkswagen, Stellantis, Toyota, Honda o Ford, que han aprendido de la mala experiencia sufrida con los chips y ahora invierten en plantas de fabricación de baterías que les aseguren la disponibilidad de este componente. La batería es la parte más cara de los vehículos y la carrera por lograr el éxito del coche eléctrico pasa por lograr que estas sean más duraderas, asequibles y de recarga rápida.

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