El precio de la luz marca su segundo máximo histórico, con el gas disparado por la invasión rusa de Ucrania

El incesante repunte del gas natural por el recrudecimiento de la guerra en Ucrania sigue cebándose con los hogares españoles. El precio de la luz en el mercado mayorista subirá este sábado un 7%, hasta los 366 euros por megavatio hora (MWh), el segundo registro más alto de la historia. Queda a un solo paso del récord absoluto: los 384 euros que se pagaron el pasado 23 de diciembre. A diferencia de entonces, este pico llega en fin de semana, cuando el coste medio de la electricidad suele caer por la bajada de la demanda industrial.

Hace justo un año, unos meses antes de que empezase la escalada del gas en los mercados internacionales —primero, por un aumento del consumo global; después, por el inicio de las tensiones geopolíticas—, el precio de la luz en España era ocho veces más barato que hoy. Y hace dos años, a las puertas de la pandemia, se pagaba 14 veces menos por cada MWh.

Los valores del mercado mayorista tienen incidencia directa sobre más de un tercio de los hogares españoles, los que cuentan con una tarifa regulada. Para ellos, cualquier incremento se traslada inmediatamente a su factura. En el resto de casos, que cuentan con un contrato del mercado libre, la subida la sufren cuando toca renovar las condiciones con su empresa suministradora: en casi todos los casos, una vez al año. El encarecimiento del recibo regulado (también conocido como PVPC), a pesar de las rebajas fiscales recién prorrogadas por el Gobierno, es el máximo responsable de que la inflación cerrase febrero en máximos desde 1989.

Por tramos horarios, este sábado el precio superará la barrera de los 300 euros por MWh en las 24 franjas de la jornada, con un máximo de 409,3 euros entre las siete y las ocho de la tarde y un mínimo de 311 justo después de comer, entre las tres y las cuatro, según los datos publicados este viernes por el Operador del Mercado Ibérico de Energía (OMIE).

El fin de la escalada de la luz no parece cercano. Cada euro de subida en la referencia europea del gas —el mercado TTF holandés, que este viernes ha superado los 200 euros por MWh por primera vez, multiplicando por diez su precio en solo un año— supone un aumento de algo más del doble sobre el precio de la electricidad. Y los futuros del mercado eléctrico español apuntan ya a precios diarios por encima de los 300 euros de aquí a final de año. En este contexto, es únicamente cuestión de tiempo que el récord absoluto de la víspera de Nochebuena sea cosa del pasado.

Ante esa imparable espiral alcista, la Comisión Europea empieza a dar muestras —por primera vez desde el inicio de la crisis energética, el verano pasado— de abrirse a negociar cambios en el sistema marginalista de fijación de precios, en el que la fuente de energía más cara marca el coste de la luz en cada tramo horario. Desligar el camino de la electricidad del gas parece, a estas alturas, la única solución posible para el que ya es el mayor riesgo para la recuperación económica.