El Gobierno levanta el veto a los vuelos y barcos de Italia, pero lo mantiene a todos los cruceros

Cuando la pandemia del coronavirus ya hacía estragos en Italia y el Gobierno español comenzó a tomar medidas para intentar contenerla, unas de sus primeras medidas fue prohibir los vuelos directos a España desde Italia y la llegada a puertos españoles de barcos procedentes del país. Este martes, dos meses después, el Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana ha derogado la prohibición de entrada a todos los vuelos y barcos de pasaje procedentes de Italia, salvo los cruceros, cuyo atraque en puertos españoles sigue prohibido sea cual sea su origen. Así consta en una orden ministerial publicada hoy en la que el departamento que dirige José Luis Ábalos flexibiliza algunas medidas relativas a la navegación marítima, relativas a permisos y traslados de embarcaciones.

En la orden, publicada hoy en el BOE, se incluye una disposición por la que se deroga la “prohibición de entrada de buques de pasaje procedentes de la República Italiana y de cruceros de cualquier origen con destino a puertos españoles”, que fue decidida por el Consejo de Ministros el 12 de marzo y entró en vigor al día siguiente. En realidad, solo queda derogada la prohibición de entrada de buques de pasaje (ferrys), porque el mismo documento especifica que se mantiene la prohibición de entrada de cruceros procedentes de cualquier lugar del mundo y de embarcaciones de recreo extranjeras que no tengan como puerto de estancia uno español, establecida en otra norma.

Asimismo, la orden publicada hoy también levanta la prohibición de vuelos directos entre Italia y los aeropuertos españoles, decidida en el Consejo de Ministros del 10 de marzo y prorrogada después varias veces. Según especifica la norma publicada hoy, el restablecimiento del control de fronteras decretado el 16 de marzo y prorrogado después varias veces, la última hasta el 24 de mayo, permite derogar la prohibición de los vuelos y atraques de buques de pasajes procedentes de Italia.

Sin embargo, el levantamiento del veto tiene un carácter casi meramente simbólico, puesto que España impuso la semana pasada una cuarentena de 14 días a todos los viajeros extranjeros que viajasen a España, que debían cumplir en el alojamiento (vivienda u hotel) en el que tuvieran pensado hacer su estancia. El Gobierno ha especificado que mantendrá la obligatoriedad de esta cuarentena para viajeros extranjeros mientras dure el estado de alarma, que negocia prorrogar hasta finales de junio. Asimismo, el Gobierno italiano anunció la semana pasada que levantará las restricciones de viajes a otros países de la UE el próximo 3 de junio. A partir de esa fecha, además, no requerirá cuarentena a los viajeros que lleguen de la UE.