La importancia de la publicidad para denunciar el mar de plástico que amenaza el planeta (II)
Nueva entrega de las acciones publicitarias que se realizan para denunciar el continuo y atroz destrozo que realizamos en nuestro propio entorno vital
En agosto del año pasado ya tocamos el alarmante tema de los plásticos y el daño que estamos haciendo al planeta, a nuestro planeta. La primera parte de "La importancia de la publicidad para denunciar el mar de plástico que amenaza el planeta" mostraba claramente los efectos de nuestra inconsciencia.
Pues bien, seis meses más tarde la cosa pinta igual (o incluso peor). Mucho congreso internacional, muchas buenas palabras y muchas agendas internacionales pero no se aprecian cambios.
La publicidad sigue insistiendo en la extrema gravedad del asunto y el daño que vamos a causar a nuestras generaciones futuras. Y aunque hay material hay para varios capítulos más. Como muestra, un botón.
La primera corresponde a la mismísima Comisión Europea, que a base de ejemplos cotidianos intenta seducirnos para dejar de usar plásticos de un solo uso. Se enmarca dentro de la campaña institucional #ReadyToChange (Listos para cambiar) para intentar minimizar el uso de este tóxico material.
La siguiente es de la ONG internacional Sea Sheperds. Estos activistas muestran de una manera muy conceptual el sufrimiento de un animal al sentirse atrapado dentro de una de estas jaulas poliméricas que los hacen prisioneros.
Otra ONG, Greenpeace hace un recorrido por las andanzas a lo largo del tiempo de cómo una aparentemente inofensiva botellita de agua puede convertirse en una pequeña arma de destrucción masiva.
Recurriendo al dicho popular de que la parte visible de un iceberg solo representa el 10% de su tamaño, National Geographic propone la disyuntiva entre cuidar nuestro hábitat o seguir acumulando basura en el 70% de nuestro planeta.
Hablando de basura, la agencia de viajes en línea india Cleartrip recurre al falso mito de la única construcción humana que se ve desde el espacio, pero ligeramente modificada, para concienciar a los turistas que la visitan lo que se van dejando atrás.
Una gráfica realmente buena la realizada por Less Plastic, una ONG que, por medio de infografías presenta la verdadera magnitud del problema. Trabajos tremendamente visuales como creativos.
Por último, y en un tono más desenfadado se desarrolla el anuncio de #SC. A modo de telenovela turca, aunque transcurre en La India, consiguen hacer aparecer en pantalla todos los tópicos del género: tío bueno con abdominales de hierro, chica completamente extasiada y una música pegadiza. A eso le añadimos el mensaje anticontaminación y ¡Bingo! Aunque la conversación no se entienda, sí que nos la podemos imaginar claramente.
Como este drama da para mucho, habrá próxima entrega.
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