El Gobierno logra salvar el contrato de relevo para la industria gracias a la abstención del PP
Si el Partido Popular hubiera votado en contra, el decreto ley con medidas urgentes para apoyar a las fábricas hubiera quedado anulado
El Gobierno ha evitado este jueves una derrota parlamentaria gracias a la abstención del PP. Ha logrado sacar adelante en el Congreso su decreto ley de medidas urgentes para apoyar a la industria. La norma incluye el contrato de relevo para este sector, una pieza clave que permite las jubilaciones parciales en las fábricas y que la industria del automóvil reclamaba desde hace tiempo. Además del PSOE, votaron a favor de la iniciativa en el Pleno del Congreso Esquerra Republicana, PDeCAT, PNV y Nueva Canarias.
El problema vino cuando Unidos Podemos y Ciudadanos anunció que se iba abstener. Si el PP votaba en contra, el contrato de relevo y otras medidas para favorecer a la industria con ventajas en los costes eléctricos, se hubiera quedado sin ver la luz. Pero el PP, tras una negociación con el Gobierno, decidió abstenerse, pese a criticar que el Ejecutivo no negociara previamente los detalles de este plan.
La patronal del automóvil Anfac celebró la aprobación del decreto, porque cree esencial el contrato de relevo. Esta figura laboral, que solo la industria podrá usar, permite la prejubilación parcial y a cambio, la empresa puede contratar a jóvenes con sueldos inferiores y con bonificaciones en cotizaciones.
La ley será modificada con enmiendas
El real decreto-ley ha sido aprobado por 110 votos a favor, 226 abstenciones y cuatro votos en contra, uno de ellos de Foro Asturias.
Los grupos ya han pedido que una vez convalidado el decreto para permitir correcciones, a través de enmiendas, se tramite como un proyecto de ley ordinario, y así será. El PP ya avanzó que exigirá cambios importantes en la parte que se refiere a ayudas energéticas. "Modificaremos todo lo que tenga que ver con el sector eléctrico y aquellos aspectos que incidan gravemente en el déficit tarifario", avanzó el portavoz adjunto de los populares en la Cámara Baja, Guillermo Mariscal. También los partidos nacionalistas PNV, PDeCAT y ERC, que han apoyado la convalidación de la norma, han anunciado enmiendas en su tramitación como proyecto de ley.
El PP había señalado que no estaba de acuerdo con el decreto, pero finalmente no ha querido dificultar la aprobación del contrato de relevo, según explicó Mariscal. Eso sí: reprochó a la ministra de Industria, Reyes Maroto, que no quisiera negociar con el PP el decreto antes de aprobarlo en Consejo de Ministros, y eso que sus socios en esta ocasión le han fallado, criticó, en referencia a Unidos Podemos.
Según Podemos, un agravio comparativo
Las críticas han sido fuertes por parte de Unidos Podemos, expresadas por la diputada Yolanda Díaz, que ha pedido esas mismas medidas se aprueben para todos los sectores y no solo para la industria y, singularmente, para el sector de la automoción. El agravio comparativo con otros sectores lo han expresado igualmente el diputado de ERC, Joan Capdevila y la diputada del PNV, Idoia Sagastizabal.
Por su parte, la ministra de Industria, Comercio y Turismo, Reyes Maroto, ha agradecido los apoyos y las abstenciones. "Creo que todos los grupos han entendido que la política industrial es una política de país", ha subrayado". "Tenemos que trabajar juntos, tenemos un trabajo conjunto con los grupos", ha dicho.
El contrato de relevo, un ahorro para la industria
La posibilidad de volver a usar el contrato de relevo a las fábricas llega tras reiteradas demandas de la industria durante los dos últimos años y, especialmente, de los fabricantes de automóviles, que utilizaron ese modelo como una de sus puntas de lanza para mejorar la competitividad. En el último acuerdo de negociación colectiva sellado entre patronal y sindicatos se hacía hincapié en la necesidad de una reforma. Ambas partes consideraban necesario volver a las condiciones previas a 2011, cuando el Gobierno introdujo modificaciones en la Ley de Pensiones con el objetivo de rebajar los incentivos a la jubilación parcial acompañada de contrato de relevo, al considerar que era una medida que tenía un impacto considerable en los recursos que llegaban a la caja de la Seguridad Social.
Según constaba en la memoria económica del real decreto ley, el coste de esta medida para la Seguridad Social ascenderá en total a los 1.778 millones de euros entre 2019 y 2026. Su uso ha quedado muy restringido: el primero y más importante es que el contrato de relevo solo se podrá utilizar cuando el trabajador que lo solicite sea de la industria manufacturera y sus tareas requieran esfuerzo físico o alto grado de atención. También se exige que la compañía cuente con un 70% de empleados indefinidos en su plantilla. Además, el trabajador que se beneficie de la jubilación parcial tendrá que haber trabajado en la empresa al menos durante seis años antes. Y deberá acreditar un periodo de cotización de 33 años. Por último, el salario del relevista no podrá quedar un 65% por debajo de la pensión del jubilado.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.