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VIVIENDA

Una feria para vender 500 casas de nuda propiedad a bajo coste

Esta fórmula permite que el vendedor se reserve el usufructo hasta su fallecimiento. El piso más barato se vende por 56.000 euros en Madrid

Sandra López Letón

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El 70% de los pensionistas tiene su pensión pública como única fuente de ingresos.
El 70% de los pensionistas tiene su pensión pública como única fuente de ingresos.

La primera feria especializada en la venta de la nuda propiedad de viviendas en España arranca hoy en Madrid. Un total de 500 casas con un precio medio de 150.000 euros se comercializan hasta mañana en el Palacio de Cibeles de Madrid. El precio de estas viviendas es desde un 40% hasta un 90% más barato respecto a los costes que se piden en el mercado por el mismo tipo de inmuebles.

Estas rebajas se consiguen porque lo que se adquiere es la nuda propiedad, es decir la compra de una vivienda a una persona mayor que se reserva el usufructo hasta su fallecimiento. La compra no le proporciona al inversor la posesión de la casa, de forma que el propietario puede seguir viviendo en su vivienda hasta su fallecimiento y recibir el dinero de la venta de una sola vez.

Cuatro agencias y algunas pequeñas inmobiliarias venden el medio millar de casas repartidas por toda España. El grueso está en Madrid, con 100 inmuebles. El resto de ciudades con más oferta son Barcelona (60), Zaragoza (45), Sevilla (44), Bilbao (38) y Valencia (34). El piso más barato se vende por 56.000 euros en San Blas (Madrid) y el más caro cuesta 525.000 euros y está en la calle Nicaragua, también en la capital. Esta opción ha ganado adeptos en los últimos dos años. Según el consultor inmobiliario Eduardo Molet, organizador del salón, “las compraventas en nuda propiedad se han incrementado en el primer semestre del año un 300%”.

Solo cuando el propietario fallece, el inversor de la nuda propiedad adquiere el pleno dominio. Por este motivo se trata de inversiones a 12 o 15 años vista, aunque varía según la edad del vendedor. Los perfiles de los vendedores son los de personas mayores, principalmente entre 75 y 80 años, que quieren continuar viviendo en su casa pero su pensión no es suficiente para llegar a fin de mes. El propietario de más edad que vende su casa en la feria tiene 99 años y vive en Villena (Alicante) y el más joven suma 59 años y su piso está en la calle Divino Pastor (Madrid).

Suelen ser personas sin herederos a los que dejar el inmueble una vez fallecidos. “También nos encontramos con personas mayores que necesitan cuidados pero que no quieren ingresar en una residencia, y con el dinero de la venta en nuda propiedad pueden pagar asistencia a domicilio, sin que sus hijos, si los tienen, tengan que desembolsar dinero”, indica Molet.

De cara al vendedor es importante el hecho de que esos pagos mensuales están garantizados mediante condición resolutoria, por lo que si el comprador impaga las rentas perdería la propiedad. Y de cara al inversor, la fórmula le garantiza la entrada a la propiedad en unos cuantos años, en los que se presupone que el activo se habrá revalorizado. Y también una rentabilidad media anual que se mueve entre el 6% y el 8%.

La operación queda registrada ante notario. Los gastos también son más bajos para el vendedor, ya que solo paga los gastos de comunidad corrientes y aquellos correspondientes a los consumos ordinarios de la vivienda (agua, electricidad, gas…), mientras que el inversor se hace cargo del IBI y las derramas extraordinarias de la vivienda.

Sobre la firma

Sandra López Letón
Redactora especializada en el sector inmobiliario, del que informa desde hace más de dos décadas. Ha desarrollado la mayor parte de su carrera profesional en EL PAÍS. Actualmente, escribe en el suplemento de información económica 'Negocios'. Es licenciada en Periodismo por la Universidad Complutense de Madrid.

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