_
_
_
_
_

El 46% de los convenios de hostelería incluye cláusulas contra la externalización

CC OO denuncia en un informe que el trabajo en el sector turístico mejora más para los hombres que para las mujeres

Una camarera hace camas en un hotel de Sevilla.
Una camarera hace camas en un hotel de Sevilla. paco puentes

El pasado 2 de julio sindicatos y patronales firmaron el nuevo convenio colectivo de la hostelería de la provincia de Málaga. En él, además de los derechos de los trabajadores de las empresas del sector en la provincia, se incluyen coberturas para los externalizados, es decir, los empleados de empresas multiservicios a las que se subcontratan tareas como la limpieza u otras. A partir de su entrada en vigor, como explica José María Martínez, responsable de CC OO Servicios, la empresa principal debe asegurarse de que la subcontratada aplica las condiciones laborales del convenio de hostelería. Para garantizarlo, esa cobertura figurará en el contrato mercantil entre la hostelera y la subcontratista y si esta falla, la principal deberá responder solidariamente.

El de Málaga es uno de los últimos convenios firmados y el que más cobertura da a los trabajadores de subcontratas, según explicó esta semana José María Martínez, secretario general de CC OO Servicios, en la presentación de un informe sobre el empleo en el sector turístico. Según ese sindicato, de los 50 convenios hosteleros que existen en España, 23 (el 46%) incluyen ya coberturas de este tipo, cláusulas que garantizan la aplicación del convenio sectorial (y no el de empresa) en los casos de externalizaciones. Tres de ellos, los de Valencia, Castellón y Teruel, incluyen estas cláusulas, pero están vencidos o pendientes de renovación. En Valencia, es precisamente la pretensión de la patronal de sacar esta cláusula antiexternalización lo que mantiene las negociaciones estancadas.

El de Córdoba se firmó este jueves y Martínez confía en que la semana que viene se firme uno más, el de Lugo. Así, serán 15 ya los rubricados este año con cláusulas de este tipo, aunque no todos son tan completos como el de Málaga. “El mínimo es que se aplique al trabajador de la subcontrata el salario del convenio sectorial. Desde ahí hasta el de Málaga, hay muchos entre medias”, afirma Martínez. Si exceptuamos los tres vencidos, los convenios con cláusulas antiexternalizaciones cubren al 69,7% de los 1,1 millones de asalariados de la hostelería y el hospedaje (76,4% con los caducados).

Cambios legales

UGT y CC OO han impulsado este año a la inclusión de cláusulas antiexternalización en los convenios y esperan que a final de la temporada turística estén firmados la gran mayoría de los 18 convenios pendientes de renovar (13 provinciales y cinco autonómicos). Y, como dice Martínez, “la pretensión es no firmar ninguno sin esa cobertura”. Ayudaría si se desarrolla la parte del pacto salarial firmado recientemente que reclama una “nueva regulación de los procesos de descentralización” para evitar el “deterioro de las condiciones laborales”. Algo que se podría desarrollar en la proposición de ley que el grupo socialista introdujo en el Congreso hace casi dos años y que todavía no ha visto la luz.

Pese a que ha sido este año cuando se ha dado impulso a las cláusulas, César Galiano, secretario general del sector de Hostelería y Turismo de UGT, la lucha comenzó en 2012, con la aprobación de la reforma laboral, que al dar prevalencia a los convenios de empresa sobre los sectoriales, abrió una puerta a la que, dice Martínez, “muchos hoteles se lanzaron”, la de externalizar tareas como la limpieza, el mantenimiento e incluso la recepción o la administración. Las camareras de piso de los hoteles, las Kellys, como se llamaron, fueron la cabeza visible de la rebelión contra la precariedad de las empresas multiservicios, que, amparadas en convenios propios muy inferiores, pagaban mucho menos a las limpiadoras. Hasta cerca de la mitad, en algunos casos.

Su caso se hizo más conocido a partir de la publicación, en 2014, del libro Las que limpian los hoteles, escrito por Ernest Cañada y editado con la ayuda de CC OO y UGT. “Hemos estado peleando contra esto desde entonces y en el último año se ha avanzado más por la situación inmejorable de muchas empresas turísticas, que se quedan sin excusas, y por las campañas contra la precariedad”, afirma Martínez. Desde UGT, Galiano recuerda que han logrado tumbar en la audiencia nacional medio centenar de convenios de empresas multiservicios por sus condiciones leoninas o por haber sido aprobados de forma fraudulenta.

No externalizas tareas "troncales"

En todo caso, otro de los objetivos del sindicato es que directamente no se puedan externalizar tareas “troncales” del sector, como son las que realiza el personal de pisos (limpieza), el de cocina, el de sala (camareros) y el de recepción (de hoteles) y administración.

Tanto Galiano como Martínez sostienen que la lucha contra las externalizaciones no ha terminado y apuntan a otro sector en el que la subcontratación está precarizando mucho el empleo: el de la logística. “Algunas empresas multiservicios han intentado entrar en sectores grandes, como el del automóvil, pero no lo han conseguido, porque las grandes industrias no pueden permitirse problemas de suministro”, explica Martínez. La cadena de subcontrataciones de Amazon (contratan a una empresa y esta a otra y esta a otra o a un falso autónomo) está creando precariedad”, afirma Marcos Ruiz, de UGT Servicios.

La agenda de Cinco Días

Las citas económicas más importantes del día, con las claves y el contexto para entender su alcance.
RECÍBELO EN TU CORREO

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_