El beneficio de Ikea en España cae un 19% por la inversión en venta online

Ikea facturó en España en el ejercicio 2017 (de 1 de septiembre a 31 de agosto) 1.466 millones de euros, un 5,8% más que el año anterior. No obstante, en un ejercicio en el que comenzó a vender a través de internet y en el que realizó inversiones en nuevos formatos comerciales, como la tienda en el centro de Madrid dedicada a dormitorios —abrirá otra este verano en la calle Goya—, los ingresos le dieron menos de sí. El resultado de explotación se ha quedado en 130 millones, frente a los 150 del año anterior, y el beneficio neto cae a 98 millones, un 19% menos que el año anterior. La empresa sumó 518 nuevos empleos, hasta cerrar con 8.676 trabajadores.

Según han explicado fuentes de la empresa, los resultados se ven lastrados por las inversiones y contrataciones realizadas para poner en marcha la venta online, que arrancó el pasado mes de noviembre. Fue entonces cuando la multinacional del mueble comenzó a entregar pedidos a domicilio. Igualmente, la empresa esgrime las inversiones para poner en marcha nuevos formatos comerciales, como las tiendas en el centro de las ciudades, y en transformación digital. "Veremos por tanto disminuida nuestra rentabilidad hasta que cubramos los gastos en los que incurrimos para llevar a cabo estos planes", afirman esas fuentes. aunque no desglosa los datos de venta online en España, en los otros 13 mercados donde la ofrece supone entre el 3 y el 10% de las ventas.

En el ejercicio cerrado el pasado 31 de agosto, Ikea no abrió ninguna de sus tiendas tradicionales —en España tiene 16 de esos grandes centros, más un punto de entrega en Navarra—, así que tampoco elevó sus puntos de venta, salvo la apertura de la tienda de Serrano, dedicada a los dormitorios. Además, la compañía explica que ha realizado provisiones para contingencias por un total de 22 millones, lo que también tiene su reflejo en las cuentas. De hecho, el año pasado el beneficio se disparó un 55% por la ausencia de provisiones que sí realizaron el año anterior. 

Ikea aduce también la "incertidumbre" en un sector muy competitivo, como es la distribución. La semana pasada, la Asociación de Grandes Empresas de Distribución (ANGED), al que pertenece Ikea, hizo balance de 2017, con un crecimiento del 3,3% en las ventas, hasta 40.194 millones de euros. La multinacional sueca afirma, pues, estar en una tendencia positiva, eso sí, con índices de crecimiento más moderados que los registrados justo después de la crisis económica.

Según ha informado la empresa en una nota, ha mejorado las ventas en todas las regiones de España (no incluye ni Canarias, que no contabiliza como Ikea Ibérica, ni Baleares, donde funciona en régimen de franquicia). Cataluña y Madrid, con 356 y 342,6 millones de euros en ventas, encabezan los mercados nacionales de Ikea. Asimismo, la empresa afirma que las visitas a sus establecimientos ascendieron a 40.6 millones, 200.000 más que el año anterior. Su web registró 108,7 millones de visitas, un 13,5% más.

De cara el futuro, la empresa sostiene que España sigue siendo un mercado estratégico para la empresa, "mercado piloto de nuevas fórmulas" comerciales. Menciona el "rediseño de su estructura logística en el país" para tener más cobertura para la venta online, que llegue a más población y en menos tiempo. No cuantifica la inversión en esta apuesta por la omnicanalidad, si bien desde el año pasado tiene vigente planes para invertir 1.500 millones hasta 2025.