Los sindicatos de Aena descartan la huelga ante la cercanía de un pacto

La amenaza de 25 jornadas de huelga en Aena hasta finales de año se disipa. Los sindicatos del grupo, los gestores y el Ministerio de Fomento han acercado mucho sus posiciones. Tanto que fuentes sindicales apuntaban ayer que ya no contemplan formalizar las movilizaciones que anunciaron a finales de agosto y cuyos trámites de convocatoria habían puesto en marcha.

“Salvo que pase un desastre, no habrá huelga”, señala uno de los negociadores. “Solo faltan detalles. Ya estamos hablándolo en las secciones sindicales y se lo tenemos que ir contando a los trabajadores. Pero el pacto se cerrará la semana que viene si todo va según lo previsto”, apunta otro de los miembros del comité negociador, integrado por las centrales CC OO, UGT y USO.

Ninguno de los dos sindicalistas consultados quiere dar detalles sobre el pacto o los “flecos” que faltan, aunque ambos coinciden en la cercanía y en que descartan el recurso a los paros.

Hasta ahora se sabía que las dos partes habían llegado a un punto de encuentro en las dos reclamaciones de las que no dependía la voluntad del Ministerio de Hacienda: la publicación en el Boletín Oficial del Estado de la prórroga del convenio del grupo Aena que firmaron empresa y sindicatos en 2015 y que todavía no se ha publicado, por lo que aún no ha entrado en vigor; y el cumplimiento de los compromisos de conciliación y diversos aspectos económicos menores que se recoge en el convenio y que, según la versión sindical, no se estaban cumpliendo.

Las otras dos reclamaciones en las que las posiciones estaban más alejadas eran las que dependen de la decisión de Hacienda: la recuperación del poder adquisitivo perdido durante la crisis (en torno al 8%) y el incremento de la plantilla de las dos empresas del grupo (Aena y Enaire) en 700 personas. En las últimas semanas, los sindicatos admitían que también había avances aquí.

Sobre el aumento de la plantilla, se apuntaba la semana pasada que el Gobierno había ofrecido un incremento de unos 300 trabajadores, una cantidad que parecía insuficiente a los sindicatos, por lo que es de esperar que en estos momentos la cifra en la que ambas partes coincidan sea más alta.

Por lo que respecta a los sueldos, la decisión depende completamente de Hacienda, puesto que Aena y Enaire forman parte del sector público y el incremento de los sueldos de sus plantillas depende de lo que marque la ley de presupuestos. “Sabemos que en esta parte hay que tener la vista puesta en los que sucede en la mesa de la función pública”, admitía la semana pasada un negociador sindical.

Y en esta mesa, la última oferta de Administraciones Públicas se acercaba a la demanda de estos sindicatos. El miércoles, Hacienda puso sobre la mesa un incremento fijo del 5,25% más una parte variable, en función del PIB, que podría elevar el aumento total hasta el 8%. Justo este porcentaje es el que calculan las centrales de Aena de pérdida de poder adquisitivo de la plantilla.