Una nueva huelga en Germanwings paralizará el 40% de sus vuelos

El colectivo de pilotos de la aerolínea alemana Germanwings vuelve a la carga. El sindicato de técnicos de cabina Vereinigung Cockpit ha hecho un llamamiento a sus afiliados a secundar los paros de 48 horas contra la política salarial del Grupo Lufthansa con los empleados de la filial de bajo coste. La huelga empezará a medianoche de este miércoles y concluirá a las 23.59 del viernes. Afectará, según los cálculos de la empresa, al 40% de los casi 1.000 vuelos previstos para el periodo de huelga y al 20% de los pasajeros que tenían comprados billetes. El paro se suma a una decena de huelgas convocadas el año pasado por el mismo sindicato y que afectaron a miles de pasajeros de la compañía aérea germana.

Pese a que España es el tercer país con más frecuencias de Germanwings —solo superado por Alemania e Italia—, en el listado preliminar de vuelos cancelados hecho pública este miércoles por la compañía no figura ninguna ruta con punto de origen o destino español. La filial de bajo coste de Lufthansa vuela a nueve ciudades de la península ibérica —Barcelona, Bilbao, Jerez de la Frontera, Madrid, Málaga, Valencia, Faro, Lisboa y Oporto— y a Ibiza y a Palma de Mallorca. 

Un portavoz de Germanwings consultado por este diario apunta que, para minimizar el impacto de los paros sobre los pasajeros, la aerolínea volará sus aviones con pilotos pertenecientes a la dirección de la empresa (y que, por tanto, no secundarán la huelga), contratará a empresas de wet lease —de arrendamiento de aeronaves con tripulación— y recolocará de los pasajeros en aviones de otras aerolíneas que cubran las rutas afectadas. La compañía pide a todos los pasajeros que tengan comprado un billete para el jueves o el viernes de esta semana que se dirijan a su página web, en la que ofrecen más detalles sobre el estado de sus vuelos.

En una estrategia similar a la seguida por otras aerolíneas europeas, afanadas por reducir costes, la exaerolínea de bandera alemana Lufthansa cedió parte de sus rutas europeas a Germanwings, un movimiento que desató importantes conflictos laborales que se han recrudecido en el último año. El detonante de la recién anunciada tanda de paros —la primera de 2015— es el cambio en la edad de retirada de los jóvenes pilotos de la aerolínea. Hasta ahora, los comandantes podían acogerse a bajas incentivadas —una suerte de prejubilaciones con el 60% del sueldo base— a los 55 años, pero la matriz pretende incrementar hasta 61 este límite de edad para las nuevas contrataciones. Un portavoz del sindicato Vereinigung Cockpit consultado por Reuters ha cargado contra la dirección del Grupo Lufthansa, al considerarla "responsable" de cuantas huelgas se lleven a cabo por "no querer" alcanzar un acuerdo con los trabajadores.