Passos Coelho decidirá en abril la salida de Portugal del programa de rescate

El primer ministro luso, Pedro Passos Coelho, afirmó hoy que decidirá en abril cuál será la salida de Portugal del programa del rescate, sin descartar que pueda pedir a la Unión Europea (UE) una línea de crédito de apoyo.

El jefe del Ejecutivo conservador marcó la fecha para un mes antes de que se agoten los fondos del préstamo concedido en mayo de 2011 por la UE y el Fondo Monetario Internacional (FMI) a cambio de un severo plan de ajustes y reformas.

En ese momento, la UE estará disponible para ofrecer esa "red de seguridad" en el regreso a los mercados del país, dijo el primer ministro, a pesar de las últimas informaciones publicadas en medios portugueses sobre supuestas reticencias por parte de los socios europeos a conceder esa ayuda.

Passos Coelho argumentó, en ese sentido, que tanto el Consejo Europeo como el Eurogrupo manifestaron que si el país cumplía con los objetivos del programa de rescate, podría contar con ese apoyo europeo en la vuelta a la financiación autónoma.

"Presumo que si necesitamos una línea de crédito, no hay razón para que no haya un acuerdo para ello a nivel europeo", afirmó el primer ministro en un foro de economistas y banqueros organizado por la revista británica "The Economist" en Cascais, a las afueras de Lisboa.

Sin aún decidir si recurrirá a esa ayuda, Portugal sopesa también el camino emprendido por Irlanda, otro país rescatado, que en diciembre pasado volvió a los mercados sin solicitar ayuda europea.

El Gobierno luso podría optar por esa posibilidad después de haber asegurado la financiación para este año en las últimas emisiones de deuda y mientras prepara su estrategia para garantizar su solvencia para 2015.

En ese proceso será clave la moderación de las tasas de interés pagadas por la deuda lusa, que desde el inicio del año han acentuado su caída, lo que refleja una mayor confianza de los inversores en las perspectivas de la economía lusa.

Sin embargo, las agencias de calificación internacionales mantienen todavía la nota de "bono basura" para Portugal y los analistas advierten de que el crecimiento de la economía lusa sigue sin ser tan firme como el esperado.

Hasta la fecha, el Producto Interior Bruto (PIB) ha encadenado cuatro trimestres de crecimiento positivo, pero cerró 2013 con una caída anual del 1,4 % respecto al año precedente.

En su discurso, el también líder del Partido Social Demócrata (PSD, centro-derecha) resaltó, no obstante, que el país ha entrado en una fase de recuperación y se ha alejado del "peor de los escenarios".