Cataluña eleva la carga fiscal en sus presupuestos para evitar más recortes

La Generalitat presentará mañana unos presupuestos para 2014 que situarán a Cataluña como una de las comunidades españolas con mayor carga fiscal, un recurso que el gobierno catalán justifica con el fin de evitar nuevos recortes del gasto.

La creación de una treintena de tasas y de varios impuestos pactados con ERC, entre ellos la recuperación del de Sucesiones, así como la continuidad de la política de privatizaciones, aportarán ingresos extraordinarios para aliviar las estrecheces de las finanzas públicas catalanas.

Según fuentes parlamentarias, los ingresos extraordinarios por estas vías podrían superar los 1.000 millones de euros.

Estas mismas fuentes han precisado que el gobierno catalán ha configurado unas cuentas para 2014 que mantendrán el nivel de gasto respecto a este año.

No obstante, cabe recordar que el gasto no financiero de los departamentos presupuestado en 2012 sumó 23.941,8 millones de euros, y que tras sucesivos recortes del gasto ese año y en 2013, el nivel de gasto de 2014 se situará por debajo de los 20.000 millones de euros.

Frente a las bajadas de impuestos anunciadas por comunidades como la madrileña o por Extremadura, Cataluña sostiene que no puede permitirse rebajar impuestos, y exprimirá al máximo su presión fiscal para evitar recortes en el gasto social.

El gobierno catalán, por ejemplo, ya ha aprobado un aumento del impuesto de transmisiones patrimoniales del 8 al 10 % - el que grava, por ejemplo, la compra de viviendas de segunda mano- y también un impuesto sobre depósitos bancarios, aunque este último no ha llegado a aplicarse porque el Gobierno lo recurrió ante el Tribunal Constitucional.

Estas fuentes han explicado que, aunque el gobierno catalán entiende que el Gobierno debería compensarle por este impuesto y además abonarle deudas por conceptos como la disposición adicional tercera del Estatut, no incluirá ambos conceptos en los presupuestos para que las cuentas del próximo año sean lo más realistas posibles.

Además de recuperar Sucesiones, el gobierno catalán prevé gravar la producción de energía nuclear, la emisión de gases contaminantes y crear un nuevo impuesto a las viviendas desocupadas propiedad de sociedades mercantiles.

En el capítulo de las tasas, aprovechará la ley de acompañamiento para cobrar por tramitar subvenciones en materia cultural, por pedir un duplicado de la tarjeta sanitaria, por servicios extraordinarios prestados por los Mossos, por implantar la euroviñeta -peaje- para camiones y vehículos pesados e incluso ha decidido cobrar por mediaciones que haga la Generalitat en un conflicto laboral previo a la vía judicial.

Asimismo, las cuentas de 2014 deberán ceñirse a un déficit más restrictivo (1 %) que el de 2013 (1,58 %), cuando el gobierno catalán optó por prorrogar las cuentas.

Otra singularidad de las cuentas de 2014 es que serán los primeros presupuestos del gobierno de Artur Mas que entrarán en vigor el 1 de enero.