Empleados municipales griegos toman las calles en protesta por los despidos

La semana comenzó en Grecia con nuevas protestas de los empleados públicos, especialmente los municipales, contra los despidos planteados por el Gobierno del conservador Andonis Samarás y como aperitivo a la huelga general que tendrá lugar mañana.

Cientos de policías locales en moto colapsaron esta mañana la Avenida Andreas Syngrou, una de las principales vías de acceso al centro de Atenas y donde se encuentra la sede del partido de Samarás, Nueva Democracia (ND), según pudo observar Efe.

Los agentes municipales se quejan de la desaparición de su cuerpo, decretada por el Gobierno para cumplir con los cupos de despidos pactados con la troika, aunque representantes de ND aseguraron que los policías locales serán contratados por la Policía Nacional.

A mediodía el sindicato de empleados municipales también convocó una protesta en el centro de Atenas y esta noche está prevista una protesta en la Plaza Syntagma frente al Parlamento organizada por la federación de sindicatos de funcionarios, ADEDY.

Todo esto como prolegómeno de la huelga general convocada para mañana por ADEDY y la federación de sindicatos de trabajadores del sector privado, GSEE, que será la cuarta del año.

Durante la jornada de huelga general se prevén interrupciones en el transporte, ya que los ferrocarriles no funcionarán y los controladores aéreos no trabajarán entre mediodía y las cuatro de la tarde (9.00-13.00 GMT), lo que provocará atrasos y cancelaciones.

Los periodistas harán un paro de media jornada y, en cambio, los médicos iniciarán mañana una huelga de 48 horas y trabajarán sólo de urgencias.

Las últimas huelgas han tenido un seguimiento muy dispar, pues mientras el sector público las secunda -incluidos los vigilantes y trabajadores de monumentos y museos, que cerrarán mañana- el privado no lo suele hacer y los comercios permanecen abiertos.

El Gobierno de Samarás ha acordado con la troika el despido de 4.000 empleados públicos este año y el paso de 25.000 al esquema de reserva laboral, por el cual cobrarán el 75 % de su salario durante 8 meses y, si en ese periodo no se les encuentra una nueva plaza en otro organismo de la Administración, serán despedidos definitivamente.

La ley ómnibus que incluye, entre otras medidas, estos recortes del personal público comenzará a debatirse mañana en el Parlamento y será votada el miércoles, aunque no se esperan sorpresas pues los dos partidos que forman la coalición gobernante suman 155 de los 300 diputados.

Según publicó hoy el diario "Efimerida ton sintakton", algunos profesores comenzaron a recibir llamadas durante este fin de semana notificándoles su despido de cara al curso que viene, a pesar de que aún no se ha aprobado la ley ómnibus.

Este punto fue confirmado a Efe por una profesora de un instituto técnico, que explicó que todos los despidos de los que tiene constancia han sido los de responsables de laboratorios.