Bildu aprueba los presupuestos de Gipuzkoa con las abstenciones de PSE y PNV
Las abstenciones del PSE-EE y del PNV han permitido hoy la aprobación definitiva de los presupuestos de Gipuzkoa de 2013, que han recibido el único apoyo de Bildu y han merecido el rechazo del PP.
El PSE-EE, en virtud de un acuerdo presupuestario con Bildu, y el PNV, desde una postura crítica pero apelando a la "responsabilidad", han dejado el terreno libre con sus abstenciones a la ratificación en el pleno de las Juntas Generales de unos presupuestos que, según el diputado general de Gipuzkoa, Martín Garitano, son "progresistas" y han sido "mejorados" en el trámite de enmiendas.
Las cuentas públicas tienen también el apoyo de Aralar, formación que no ha podido participar hoy en la sesión, ya que Rebeka Ubera ha abandonado la cámara para ser parlamentaria vasca y aún no han llegado las credenciales para su sustituta, por lo que este grupo hoy no ha podido ejercer su representación.
El presupuesto de gestión de la Diputación, que asciende a 661 millones de euros (un 2,67 % menos que en 2012), incluye partidas consensuadas entre el PSE-EE, Bildu y Aralar y apoyadas por el PNV para fomentar el desarrollo económico y el empleo, que ascienden a 7,6 millones de euros.
Tras la votación y la intervención de los portavoces de los grupos, ha tomado la palabra Martín Garitano, quien se ha felicitado por la aprobación de las cuentas públicas, lo que, ha admitido, ha sido posible "por la postura responsable de la mayoría de la Cámara, porque los grupos junteros socialista, Aralar y Bildu han tenido la voluntad de mejorar los presupuestos y llegar a acuerdos".
Por su parte, la portavoz del PSE-EE, Rafaela Romero, ha subrayado que el acuerdo en torno a la promoción económica, que ha llevado a su grupo a permitir la aprobación de los presupuestos, "supone un punto de inflexión en la gestión foral en esta legislatura".
Aunque el PNV también se ha abstenido, lo ha hecho desde una postura crítica y discrepante, según ha explicado su portavoz, Markel Olano, quien ha insistido en que el gobierno foral de Bildu "carece de estrategia para hacer frente a la crisis".
El único voto en contra que ha recibido la norma presupuestaria ha provenido del PP, cuyo portavoz, Iñigo Manrique, ha explicado que se trata de un proyecto "paliativo, escasamente inversor", que no apoya a las empresas ni aborda una necesaria "reforma en profundidad" de la política social. "Son iguales que los del año pasado y si somos coherentes debemos votar en contra", ha dicho.
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