Deutsche Bank tendrá que indemnizar a los herederos del magnate Leo Kirch

El Deutsche Bank deberá indemnizar a los herederos del magnate mediático alemán Leo Kirch. Poniendo fin a un proceso judicial de más de una década, un tribunal de Múnich sentenció el viernes en contra del mayor banco de Alemania por los perjuicios causados a Kirch por el entonces director de la entidad, Rolf Breuer, en 2002. El banquero dudó en una entrevista de la solvencia del imperio mediático de Kirch, cuyo conglomerado de empresas quebró dos meses más tarde, incapaz de acceder a más créditos. Kirch acusaba a Breuer de haber hecho aquellas declaraciones premeditadamente. Los jueces no han fijado aún el montante de la compensación económica que cobrará la familia de Kirch, muerto el año pasado.

Durante el juicio habló de daños de entre 120 millones y 1.500 millones de euros. Los herederos del magnate pedían 2.000 millones. En su opinión, las declaraciones de Breuer precipitaron la caída de la empresa, porque el escepticismo del mayor banquero privado del país cortó todas las líneas de crédito que mantenían a la empresa en funcionamiento. Además, sostienen que la entrevista paralizó las conversaciones con la multinacional estadounidense Walt Disney, a la que querían vender una parte de la emisora alemana ProSieben. Breuer, por su parte, dice que sus declaraciones se debieron a “un error intelectual”.

Los herederos del magnate de los medios pedían 2.000 millones

Los jueces bávaros no le creen. Consideran que Breuer tenían la intención de presionar a su cliente Kirch para colocarlo “bajo el escudo protector” de su banco. Según el presidente de la sala Guido Kotschy, las pruebas y testimonios recogidos desde 2002 demuestran que Breuer dejó a Kirch ante dos alternativas: la insolvencia o la dependencia del Deutsche Bank. Kirch eligió la primera y tras la quiebra emprendió esta larguísima batalla legal que concluyó el viernes. No vivió para disfrutar de este éxito. A cambio de salvar a Kirch, el Deutsche Bank habría obtenido la posibilidad de despedazar su imperio televisivo. El magnate tenía, además de las televisiones, una enorme cartera internacional de derechos cinematográficos.

Pese a la condena, el juez Kotschy descartó “las teorías conspiratorias” de quienes acusan al Deutsche Bank de haber forjado un plan para acabar con Kirch. Si bien sus empresas “habrían podido salvarse”, según el juez no es menos cierto que “ya estaban listas para la insolvencia” antes de que Breuer abriera la boca en su entrevista a Bloomberg. Kirch arrastraba graves problemas financieros y estructurales. La entrevista dio la puntilla. Esta consideración permite suponer que la indemnización final estará más cerca de los 120 millones de euros que de los 1.500.

Los abogados de ambas partes tienen un mes para cerrar un arreglo. Durante el proceso, el juez había propuesto una indemnización de 775 millones de euros con la que el sucesor de Breuer, Josef Ackermann, estuvo de acuerdo. Pero el banco la rechazó, lo mismo que una segunda propuesta de unos 800 millones de euros. Los herederos de Kirch se quejaban este verano de que las propuestas del Deutsche Bank se hacían “cada vez más pequeñas”. Ni Breuer ni Ackermann están ya en Deutsche Bank. El contrato del segundo terminó en 2010, pero el banco lo prorrogó por otros 3 años. Dejó el puesto en mayo.

Al leer la sentencia, el juez le dijo a Breuer que su entrevista fue “una humillación pública” para Kirch, en la que probablemente se vulneraron los criterios de confidencialidad a los que se debe un banquero. Además,m la tachó de “inmoral”.