Más vale firmar la hipoteca con la banca intervenida antes del sábado

Final feliz a tres meses de angustia para recibir las llaves de sus viviendas en Getafe y San Sebastián de los Reyes. El de los afectados por un problema surgido entre Esfinge, la promotora de sus pisos, e Ibercaja, que anotó un embargo contra todos los bienes de la inmobiliaria por una deuda contraída tras una operación realizada en Oviedo. El pasado martes todo se solucionó, pudieron escriturar y recibir las llaves de sus pisos.

Otros no han tenido tanta fortuna, y la obligatoriedad de transferir los activos tóxicos de los bancos nacionalizados (Bankia, Novagalicia, Catalunya Caixa y Banco de Valencia) a la Sociedad de Gestión de Activos para la Reestructuración Bancaria (Sareb) -el próximo sábado está previsto que se produzca el volcado informático de los activos transferidos- ha dejado a no pocos compradores de vivienda en la estacada. Sin poder escriturar ya sus viviendas, sin saber cuándo podrán hacerlo y quién financiará la compra.

De momento, se quedan sin la hipoteca que tenían ya apalabrada con unas determinadas condiciones y envueltos en un mar de dudas. Para empezar, ese crédito promotor al que debían subrogarse cambia de titular, pasa del banco nacionalizado a la Sareb. Una modificación que debe ser inscrita registralmente, lo que llevará su tiempo teniendo en cuenta las decenas de miles de activos que se traspasan.

A partir de aquí, teniendo en cuenta que la Sareb es una sociedad que no puede otorgar financiación, habrá que ver quién la concede y en qué condiciones. O esos bancos nacionalizados, que supuestamente tendrían muy limitada esta capacidad, o el resto de entidades sanas, que entrarían en un juego perverso al tener que financiar pisos que no son de su propiedad, justamente la estrategia que habían dejado aparcada hace tiempo.

En Getafe y San Sebastián de los Reyes han recibido las llaves el martes

Además de los bancos rescatados o los bancos sanos, obligados o con incentivos, Rafael Powley, director de consultoría estratégica de Jones Lang Lasalle, abre una tercera vía para financiar la venta de los activos de la Sareb, bien a través de crédito público o a través de "actores no presentes o poco presentes en España". No obstante, deja caer Powley que esta financiación no tiene por qué ser una mala operación. Todo lo contrario. "Puede ser un buen negocio financiar vivienda al 50% del precio de pico si se produce una recuperación económica a partir de 2014", apunta.

Todo un limbo hipotecario del que se han librado por los pelos los adjudicatarios de esas promociones de Getafe y San Sebastián de los Reyes. El asunto que había demorado la entrega de sus casas no tenía que ver directamente con el desarrollo de la promoción, pero la postura de Ibercaja fue llevada hasta el último extremo. "Aunque parezca excesivo, estaba en su derecho. Tenían una deuda y la querían cobrar como fuera", comenta el abogado de algunos de los afectados en Getafe, Ignacio Serrano.

Si bien la promoción de Getafe ya estaba completamente terminada a principios del pasado verano, "con certificado final de obra, pasada la inspección municipal y la de la Comunidad de Madrid", apunta Serrano, en septiembre todo quedó en suspenso.

"Tres días antes de escriturar la división horizontal, se comunica la anotación de un embargo de la promoción y de otros bienes a nombre de Esfinge", recuerda el letrado de los afectados. La medida obligó a Esfinge, a instancias de Bankia -la entidad que había financiado la promoción con dos préstamos al promotor por 21 millones de euros-, a retirar la solicitud de división horizontal.

A partir de aquí, un sinfín de manifestaciones de los afectados y reuniones entre las partes implicadas, finalmente resueltas el pasado martes cuando Ibercaja, Bankia y Esfinge alcanzaron el acuerdo tras el que, inmediatamente después, se produjo la entrega de llaves a los adjudicatarios. Los de San Sebastián de los Reyes, por la mañana, y los de Getafe, el martes por la tarde y ayer, miércoles.

El acuerdo final no estuvo exento de cierta tensión, ya que Bankia, según comenta uno de los letrados asistentes, rectificó varias veces el texto definitivo del acuerdo hasta estampar su firma al pie del mismo.

La situación se tornó dramática por momentos, ya que los adjudicatarios habían sido citados en el mismo lugar para firmar las escrituras de sus casas y veían pasar las horas y no podían hacerlo, sabedores, como eran, de que esa fecha límite del 14 de diciembre estaba a la vuelta de la esquina y no había tiempo que perder. "Aunque Bankia había pedido una prórroga hasta el 31 de diciembre, el FROB se la denegó porque el volcado informático de los activos a la Sareb se debe realizar inexorablemente el 15 de diciembre", apunta el abogado Ignacio Serrano.

Esfinge había comprado en mayo de 2007 las dos parcelas donde se han construido 152 pisos protegidos de precio limitado en el nuevo barrio de Buenavista, en Getafe. Pagó por ellas 7,7 millones de euros al consorcio Los Molinos-Buenavista. La actuación fue financiada con sendos préstamos al promotor concedidos por Caja Madrid por un importe de casi 21 millones de euros.

En el caso de San Sebastián de los Reyes, más de lo mismo con las 78 familias que resultaron adjudicatarias de sus pisos en el barrio de Tempranales hace más de cuatro años. El embargo de Ibercaja ha sido el último de los obstáculos superados. Antes tuvieron que afrontar otro inesperado, como fue la subida del módulo aplicado por Esfinge a principios de año, para aumentar el precio del metro cuadrado de 1.474 a 1.940 euros. Al final, después de demandas y recursos, el aumento se quedó en 1.650 euros.