A. Latina presenta una gran oportunidad de inversión, según una conferencia

El presidente del Banco Mundial Jim Yong Kim, orador principal de esta edición, en la que participaron el empresario mexicano Ricardo Salinas y el secretario general adjunto de la Organización de Estados Americanos (OEA), Albert Ramdin, entre otros, apuntó que la región, de hecho, necesita una "inversión masiva del sector privado en infraestructuras".

"Se necesita inversión privada en salud y educación, y necesita la diversificación económica más allá de la producción de las materias primas", señaló Kim, que destacó la importancia de tener servicios más competitivos y aumentar la productividad.

En concreto señaló que según las proyecciones para el año 2025 la ciudad de Bogotá necesitará doblar su oferta de inmuebles además, por ejemplo en Lima (Perú) todavía hay un quinto de la población que no tiene acceso a agua potable.

Estas inversiones pueden contribuir a mejorar la prosperidad de la región, por lo que consideró que los Gobiernos deben hacer un esfuerzo para facilitar su labor, por ejemplo, mejorando los procesos burocráticos.

El responsable de la institución señaló que se tarda una media de 54 días para establecer un negocio, un proceso que consideró "demasiado lento" y abogó por "reformas integrales" en este sentido.

"Tenemos que buscar una manera de construir la relación entre el sector privado y público para que los motores del crecimiento económico puedan funcionar", dijo el responsable del Banco Mundial que señaló que el sector privado genera el 90 por ciento de los puestos de trabajo.

El objetivo es crear unas condiciones favorables a la inversión que permitan crear riqueza y "más prosperidad a la región" porque según su experiencia "para luchar contra la pobreza hay que impulsar la prosperidad, y que esa prosperidad proviene en parte de un sector privado sano, robusto e incluyente", concluyó.

El empresario mexicano, Ricardo Salinas, responsable del Grupo Salinas y de TV Azteca, aseguró que "Latinoamérica es una gran oportunidad para hacer negocio".

Salinas aseguró que cada vez hay más corporaciones en la región pero consideró que es necesario que los gobiernos garanticen la integridad de las instituciones porque "la corrupción es como un cáncer que poco a poco destruye todo intento de desarrollo".

En este sentido subrayo que "la transparencia y la responsabilidad y la rendición de cuentas es fundamental" para garantizar las inversiones y el comercio.

En la parte institucional, el secretario general adjunto de la Organización de Estados Americanos (OEA), Albert Ramdin, destacó la importancia de que el sector público y privado cooperen no sólo en términos comerciales sino para contribuir al desarrollo de la región.

Ramdin señaló el "sólido compromiso" de la OEA para ayudar a los países de la región a luchar contra la corrupción y respetar las leyes y aseguró que es necesario también incluir al sector privado para invertir en educación "y crear una clase media fuerte".

El número dos de la OEA reconoció que todavía hay algunos retos en materia logística y de transporte y destacó que la región necesita centrarse en "innovación" para mejorar la competitividad y la productividad.

Los expertos señalaron que América Latina no se ha visto afectada por la crisis financiera global en igual medida que en otras regiones del mundo y "por primera vez en muchos años se dan factores que no habíamos visto en mucho tiempo", señaló Francesco Olivieri, de ENEL Green Power North America.

"Creo que hay grandes posibilidades de que encaremos un proceso de cambio" para mejora las inversiones en la región al tiempo que los países implementan programas para fomentar el respeto de las ley, tanto nacional como internacional.

En este sentido, Michael McCullough, de la Asociación de Abogados de EEUU, señaló que todavía hacer negocios en Latinoamérica es "un poco informal" por lo que consideró necesario que empresas e instituciones trabajen juntos para establecer un marco legal para hacer negocios.

Como ejemplo, Jorge Sequeira, director general de PROCOMER, señaló la iniciativa de "ventanilla única" que puso en marcha Costa Rica en 1996 para facilitar los trámites empresariales.