Soria anuncia una bajada del 2,2% en la tarifa de la luz tras la subasta de energía

La tarifa de último recurso (TUR) que pagan 20 millones de usuarios bajará un 2,2% a partir del 1 de octubre. Lo confirmó este martes el ministro de Industria, José Manuel Soria, en el Senado tras conocer que la subasta trimestral de energía (Cesur), que supone la mitad del recibo, se cerró con un descenso en los precios del 4,6%. Hasta aquí las buenas noticias. Porque el recibo de la luz seguirá subiendo de aquí a diciembre, convirtiendo a España (probablemente) en uno de los pocos países en los que la luz baja subiendo o viceversa. La razón de por qué subirá el recibo mientras el ministro del ramo anuncia bajadas de tarifas es sencilla: el Tribunal Supremo dio la razón a las eléctricas en contra del Gobierno, que congeló la parte regulada del recibo, y ha obligado a refacturar el último trimestre de 2011 y el primero de 2012. La consecuencias será una subida del 7% entre agosto y diciembre. Súmese la subida del IVA del 18% al 21% y ya está completa la explicación de cómo la luz, de aquí a diciembre, subirá bajando (o viceversa).

Soria dejó claro, según Europa Press, que el Gobieno no dará marcha atrás en la congelación de los peajes: "Hemos dicho que si el precio de la luz sube o baja en España va a ser consecuencia de lo que diga el mercado". "En la subasta de hoy (este martes) el mercado ha dicho que baja el precio de la luz un 4,9%. Como supone un 50% del precio, quiere decir que en el precio de la luz habrá una disminución de aproximadamente un 2,1% o 2,2%. Está confirmado", añadió.

La vigésima subasta de electricidad entre comercializadoras de último recurso (Cesur) se cerró con una bajada del 4,6%, lo que ejerce una presión a la baja del 2% en la revisión de octubre de la Tarifa de Ultimo Recurso (TUR) de la luz, según han indicado en fuentes del sector. Desde el Gobierno, el Ministerio de Industria ya ha mostrado su disposición de no tocar la parte regulada del recibo eléctrico, lo que, si se confirma, permitirá que el abaratamiento en la materia prima se traslade a la factura.

El resultado de la subasta celebrada este martes, en la que las comercializadoras encargadas de suministrar la tarifa regulada adquieren la energía correspondiente al tercer trimestre, tiene un peso ligeramente inferior al 50% sobre la tarifa que abonan la gran mayoría de usuarios de baja tensión. El 50% restante corresponde a los peajes eléctricos, en los que se recogen los costes regulados del sistema eléctrico y cuya cuantía debe calcular el Gobierno. Con este dinero el Estado retribuye a las empresas por transportar, distribuir, producir sin contaminar (primas a las renovables) y atender las necesidades de las islas, Ceuta y Melilla.

A diferencia de la media europea, donde las tarifas han aumentando una media del 19,9%, el recibo de la luz en España ha subido más de un 70% en los últimos seis años, un encarecimiento que además no ha supuesto un freno al llamado déficit de tarifa, que es la deuda acumulada con las empresas eléctricas porque lo que pagan los usuarios no ha sido suficiente para cubrir el coste de fabricar la energía.

Sobre lo que pasó en las últimas subastas, la de junio se cerró con un alza del 9,3% en el coste de fabricar la energía, lo que ejerció una presión al alza del 3,9% sobre la TUR. Como el Ministerio de Industria decidió en aquella ocasión congelar también los peajes, la factura subió en julio en esta misma proporción (3,9%).

Aparte de este incremento, el Gobierno acató en marzo la sentencia del Supremo que le obliga a refacturar los consumos del cuarto trimestre de 2011 y del primero de 2012. Esta revisión se aplicará de forma prorrateada entre agosto y diciembre, y supone un alza del 7% en el recibo de la luz. Además de estas dos subidas, en septiembre comenzó a aplicarse el incremento del IVA, que en el caso de la electricidad ha pasado del 18% al 21%.

La subasta de este martes es la primera desde que el Gobierno anunció la puesta en marcha de siete impuestos sobre la energía para taponar el déficit de tarifa, que ronda los 24.000 millones de euros y que, por ley, en 2013 debe ser igual a cero.