El Banco de España pide que se anule la ley que castiga los depósitos caros

Ha pasado un año y no ha dado el resultado esperado. En junio de 2011 el Gobierno anterior intentó frenar la guerra de depósitos que vivía la banca con una norma que castigaba a los que pagaban tipos altos, que estuvieran por encima del euríbor. Los sobretipos obligaban a realizar mayores aportaciones al Fondo de Garantía de Depósitos (FGD). Fue una manera de hacer frente al cierre de los mercados mayoristas.

Sin embargo, según fuentes del mercado, el Banco de España cree que la norma no ha dado resultado. El FGD ha recibido pocos ingresos extraordinarios, que era uno de los objetivos. Por eso, ha solicitado Economía que anule el real decreto. Este sería una de las primeras peticiones del nuevo equipo gestor del Banco de España dirigido por Luis María Linde, que está en fuerte sintonía con el organismo que dirige Luis de Guindos.

Tanto fuentes del ministerio como del Banco de España prefirieron no hacer comentarios sobre esta cuestión. Sin embargo, entre las entidades se espera que se le haga caso a Linde y se acabe con esta norma porque la situación actual es muy diferente de la de hace un año. Además, hay un problema en el horizonte. En el mercado, algunas entidades han esquivado la norma ofreciendo altas remuneraciones en los pagarés en lugar de en los depósitos. Cualquier medida es buena para encontrar dinero con el que hacer frente a los vencimientos. Pero los pagarés no están cubiertos por el Fondo de Garantía, por lo que si la entidad que los emite tiene problemas de solvencia, puede provocar problema financiero para los clientes. Pero incluso algunos ven también momentos difíciles desde el punto de vista reputacional para los supervisores. Sobre todo ahora que el escándalo de las participaciones preferentes no encuentra una solución para las cajas nacionalizadas.

En cualquier caso, también existen distorsiones estadísticas. La lucha contra la guerra de depósitos ha drenado el saldo del pasivo oficial. Según las estadísticas del Banco de España, ahora hay 1,142 billones en depósitos. Esta cifra supone una caída de 60.000 millones respecto a los de mayo de 2010. El saldo actual es similar al que tenía el sector en 2008. La cifra máxima se alcanzó en 2010, ejercicio que cerró con 1,216 billones. Esta caída estropea mucho el cálculo de créditos sobre depósitos, un ratio que vigila de cerca la Unión Europea. Incluso es una de las condiciones que se ha estudiado implantar a futuro en los sistemas financieros para evitar más burbujas de crédito como la actual. Las autoridades consideran que el paso a los pagarés produce una distorsión y una volatilidad en el mercado del pasivo bancario que conviene corregir cuanto antes.

La petición del Banco de España no significa que el supervisor quiera alentar la guerra de depósitos. Las autoridades consideran peligroso que las entidades acaben con sus márgenes ofreciendo sobre tipos. Sin embargo, ahora que las Letras del Tesoro ofrecen una rentabilidad cercana al 4%, se está produciendo un movimiento hacia los pasivos del Estado, que se ha convertido en el más duro competidor de la banca. Es otra consecuencia de la crisis de deuda que vive España. Por eso, ahora es posible encontrar ofertas de entidades que pagan más del 3% a plazos cortos. Sobre todo en las entidades que trabajan por Internet y por teléfono. Las entidades admiten en privado que ha crecido mucho el número de subasteros, los que cambian de banco según la oferta.