Rusia deberá indemnizar a los inversores españoles de la petrolera Yukos

El Tribunal de Arbitraje de Estocolmo ha ordenado al Gobierno ruso indemnizar a inversores españoles las pérdidas causadas tras la liquidación de la otrora petrolera más grande de Rusia, Yukos, de Mijaíl Jodorkovski, ha infomrado hoy la página web del exmagnate.

Siete fondos de inversión españoles, en su mayoría Sicavs y clientes individuales, presentaron sus demandas en 2007 basándose en un acuerdo ruso-español sobre la protección de inversiones, informó la empresa jurídica Covington & Burling, responsable de defender los intereses de los demandantes.

El acuerdo bilateral obliga a una de las partes a indemnizar los daños a la otra en caso de que ésta perjudique sus intereses con "acciones impropias". Sin embargo, aún no se ha especificado el monto de las cantidades reclamadas por las empresas españolas ya que es confidencial. En cualquier caso, fuentes del bufete de abogados Cuatrecases, que son los que han llevado el proceso, han avanzado que se trata de una cantidad "importante".

El Tribunal de Arbitraje calificó la persecución judicial contra Yukos como un "pretexto para apoderarse de los activos de Yukos con el objetivo de traspasarlos a (la petrolera estatal) Rosneft".

El comunicado de Covington & Burling indica que "la decisión del tribunal obliga a reponer los perjuicios a todos los inversores" de la petrolera.

Es la segunda decisión a favor de los inversores de Yukos, toda vez que la primera, tomada en el Reino Unido en septiembre de 2010, obligó a Rusia a pagar las pérdidas financieras a la empresa inversora RosinvestCo.

Con anterioridad, el Tribunal de Estrasburgo condenó a Rusia por el proceso de expropiación de la petrolera, la tercera sentencia condenatoria contra este país por el mismo caso, si bien no concretó entonces en su fallo ninguna indemnización.

Según el fallo, Rusia violó el artículo 6 del Convenio Europeo de Derechos Humanos sobre el derecho a un juicio justo.

Jodorkovski, en prisión desde 2003 y que cumple dos condenas, la segunda por robar crudo a su propia compañía, ha denunciado que el proceso en su contra tiene motivaciones políticas y busca legitimar la fraudulenta nacionalización de Yukos y la venta de sus activos a la estatal Rosneft.

El presidente ruso, Vladímir Putin, defendió en varias ocasiones el proceso judicial abierto contra el empresario, considerado un preso político por activistas de derechos humanos.