‘Le Monde’ aconseja a Rajoy: “Coja el teléfono y llame a Bruselas”

El diario vespertino francés Le Monde dedica este martes su editorial de primera página a la crítica situación de la economía española y califica la actitud de Mariano Rajoy ante la "creciente desconfianza" que produce en Europa el estado de la banca como "quijotesca", "valiente" y "testaruda". El artículo explica que el jefe del Gobierno sigue repitiendo que España no necesita ayuda exterior ni de los mecanismos de rescate de la eurozona, y que "España se las arreglará sola, a diferencia de Portugal, Irlanda, y mucho menos Grecia". Pero añade que la situación de la cuarta economía del euro pesa sobre la de la tercera, Italia, "en un momento en el que menos conviene porque Grecia está al borde de la ruptura".

El editorial se pregunta si "la corajuda ambición de enderezar solos el sistema bancario, una misión más que difícil", no fragiliza al conjunto de la eurozona, y afirma que los precedentes no favorecen a Monsieur Rajoy: "En Dublín y en Lisboa mantuvieron durante largo tiempo el mismo discurso: no necesitamos ayuda. Pero después, cuando los Gobiernos dejaron de acceder a financiar su deuda en los mercados, hizo falta pedir la ayuda externa. En general, demasiado tarde, cuando la salud del enfermo había empeorado considerablemente".

Según Le Monde, "en economía, el arte del momento justo lo es todo o casi todo", y España debe estar preparada para financiar no solo a sus bancos sino también a sus regiones. Y aunque reconoce que entiende las reticencias de Rajoy a pedir un rescate, porque España "todavía accede al mercado de deuda aunque sea al 6,5%", "porque ha hecho reformas estructurales impresionantes", y porque "ha puesto en marcha un programa de austeridad drástico sin quejarse continuamente, como otros", la conclusión del editorial es clara. Aunque sea percibido como "humillante" pasar por el aro del Fondo Monetario o de la Unión Europea, y aunque el Mecanismo Europeo de Estabilidad se adapte "mal a la situación española", afirma Le Monde, "en el interés del euro, Monsieur Rajoy debería coger el teléfono y llamar a Bruselas".