La economía española se estanca en el tercer trimestre

El Banco de España afirma en su ultimo boletín económico publicado hoy que la economía española, tal y como ya ocurrió en 2010, se estancó en el tercer trimestre del año. Según explica la institución en el informe, correspondiente al mes de octubre, la pauta de debilitamiento de la primera parte de 2011 "habría proseguido en los meses centrales del ejercicio, en un entorno marcado por el agravamiento de la crisis de la deuda soberana de la zona del euro".

Ante este panorama y según los datos disponibles hasta la fecha, información "todavía parcial e incompleta", señala, en el tercer trimestre el PIB (Producto Interior Bruto) habría registrado una tasa de variación intertrimestral nula, situando su tasa interanual en el 0,7 %. No obstante, estas tasas han de tomarse con más cautela de lo habitual, añade el supervisor, que justifica esta advertencia por las diferencias estadísticas que puedan surgir con el cambio de la base de la Contabilidad Nacional.

Bajando al detalle, el organismo presidido por Miguel Fernández Ordóñez, la demanda interna habría experimentado un nuevo retroceso en el tercer trimestre (con una aportación negativa de 0,8 puntos porcentuales con respecto al periodo entre abril y junio). El motivo de este frenazo estaría, concreta el Banco de España, en la contracción del gasto público derivado de los planes de ajuste contra el déficit de las comunidades y la persistente parálisis de la inversión residencial. El consumo de los hogares, por su parte, y la inversión empresarial sí habrían registrado pequeños avances tras la sorpresa, en este caso positiva, que arrojó el primero de estos dos apartados en el segundo trimestre.

Entre abril y junio, el PIB creció un 0,2% respecto al arranque del año, cuando avanzaba a un ritmo del 0,4%. Y el incremento interanual se quedó en el 0,7%, dos décimas por debajo del dato de marzo. Esta desaceleración, que se hace más aguda con el estancamiento sufrido en el tercer trimestre, supuso el primer retroceso en el crecimiento expresado en tasa interanual desde la Gran Recesión, que acabó en el arranque de 2010.

Riesgos para el déficit

Junto al dato del crecimiento, el Banco de España también analiza la evolución reciente del déficit público. En este apartado, alerta de que la debilidad que está mostrando la recaudación de impuestos y la inercia del gasto, sobre todo en las comunidades autónomas, ponen en riesgo el cumplimiento del objetivo de no superar el 6 % del PIB de 2011.

Por este motivo, señala que si en los próximos meses se constata la posibilidad de que estos riesgos se materializasen sería "imprescindible" adoptar medidas adicionales para cumplir con los objetivos fiscales. En cualquier caso, el supervisor considera que la magnitud de la desviación está a tiempo de ser corregida mediante una correcta gestión de la ejecución presupuestaria en lo que queda de ejercicio.

En la misma línea, afirma que los Presupuestos Generales del Estado para 2012, que se aprobarán con cierto retraso debido al calendario electoral, "deberán articular los esfuerzos necesarios" para asegurar el objetivo de déficit para ese año, situado en 4,4 % del PIB.

Previsiones más pesimistas

El dato de crecimiento, que es el primero que se conoce sobre la evolución más reciente del Producto Interior Bruto, se conoce después de que el viernes el ascenso del paro hasta rozar los cinco millones de personas (una cifra que sí se supera si la estadística se corrige de la influencia estacional, que es como se calcula también el PIB) disparase todas las alarmas.

El mal dato de la Encuesta de Población Activa volvió a poner de relieve que la crisis, tras más de tres años desde el inicio de los problemas, es capaz de seguir superándose a sí misma. Tal y como era habitual en lo peor de la crisis, en el paso de 2008 a 2009, hay que volver a revisar, a la baja, los pronósticos. También sobre el PIB. Aunque, eso sí, la proyección que ha realizado hoy el Banco de España, y que tendrá que ser confirmada por el INE el 11 de noviembre, no está entre las más pesimistas, ya que hay expertos que no descartan una recaída y el regreso a las tasas intertremestrales de crecimiento negativas en la segunda mitad del año.

"Cambiaremos las previsiones del PIB seguro", corroboró el viernes María Jesús Fernández, de la Fundación de Cajas de Ahorros, tras conocerse el dato de la EPA. En septiembre, Funcas ya vaticinaba un estancamiento total (0%) en el tercer trimestre, con "riesgos a la baja", que es la fórmula que emplean los analistas para advertir que es probable que el resultado final quede por debajo.

Otros, como los expertos del Instituto Flores de Lemus, ya apuestan por un retroceso del PIB en el tercer trimestre. El centro de investigación achaca a "la ralentización de las economías de los países centrales del euro, los malos datos del mercado laboral español durante el tercer trimestre y la probable contracción del crédito en España por los requisitos adicionales de capital" su drástico retroceso en las previsiones del PIB, publicado horas antes de que el INE desvelara la EPA del tercer trimestre. Los expertos de Flores de Lemus creen ahora que la economía española puede haber decrecido un 0,1% en ese tercer trimestre. Y eso sin tener en cuenta el inesperado repunte en la destrucción de empleo. El instituto universitario era de los que vaticinaban que se superarían los cinco millones de parados, pero en el primer trimestre de 2012.

Flores de Lemus se suma así al Centro de Predicción Económica, el único servicio de estudios que anticipaba, a finales de septiembre, que el PIB podía haber retrocedido (un -0,3%, según su estimación). Otros analistas creen que la contracción es más probable en el tramo final de 2011. "Tenemos que revisar todos los datos, pero se incrementan los riesgos de caída trimestral en el cuarto trimestre", apunta Sara Baliña, de Analistas Financieros Internacionales. Hace dos semanas, era el servicio de estudios del BBVA, el que corregía su estimación para situar el PIB del tercer trimestre cerca del estancamiento total. Y añadía: "Con esta previsión del tercer trimestre, aumenta la probabilidad de que pueda producirse una contracción económica en el cuarto trimestre".