Irlanda divide en dos el nacionalizado Anglo Irish Bank

Irlanda dio ayer un giro pronunciado al plan de reestructuración del nacionalizado Anglo Irish Bank para satisfacer a Bruselas y opta por escindirlo en dos entidades, de las cuales una será liquidada o vendida progresivamente. Al principio, Dublín quería escindir Anglo en un "banco malo" dedicado a deshacerse de sus activos basura y uno "bueno" que gestionaría el resto de los préstamos.

El ministro de Finanzas, Brian Lenihan, anunció ayer que finalmente el Gobierno apuesta por dividir Anglo Irish Bank en un banco de financiación (que heredaría el conjunto de sus depósitos) y un banco de recuperación de activos que se centraría en los préstamos de la entidad no transferidos a la NAMA (banco que creó el Estado irlandés para asumir los activos dudosos del resto de entidades). Este nuevo banco de recuperación sería "vendido todo o en parte, o sus activos liquidados progresivamente", ha precisado el ministro.

El presidente de Anglo Irish Bank, Mike Aynsley, había adelantado el domingo al Sunday Business Post que la Comisión Europea parecía ir encaminada hacia un rechazo del plan inicial de la escisión para privilegiar la liquidación progresiva de la entidad.

Los depósitos de los clientes del banco, que ha tenido en el primer semestre del año una pérdidas de 8,2 millones de euros, han caído durante este periodo 4.000 millones de euros hasta llegar a los 23.100 millones. Standard & Poor?sapuntó el mes pasado que el Estado debería inyectar 35.000 millones extra.

Brian Lenihan, quien los dos últimos días había tratado el tema con la Comisión Europea y sus colegas de otros países, afirmó ayer que con esa medida se restablecerá la confianza en el sistema financiero del país. "La decisión que ha tomado el Gobierno dará certidumbre sobre el futuro del banco Anglo Irish", señaló el ministro, quien agregó que la resolución del problema que planteaba esa institución "es esencial para promover la confianza y la estabilidad en nuestro sistema financiero".