España disipa los temores sobre su deuda y la Bolsa sube un 3,6%

Pese a los problemas de déficit y las malas perspectivas económicas, los inversores mantienen su confianza en España. Aunque no sale gratis. El buen resultado obtenido este martes en la colocación combinada con seis bancos de 6.000 millones de euros de deuda, un éxito medido en términos de demanda, permite augurar que el Tesoro no tendrá mayores problemas para afrontar los importantes compromisos de pago que tiene a lo largo de este mes y que ascienden a 24.000 millones de euros. La respuesta "muy positiva" que ha tenido la operación, según fuentes del Ministerio de Economía, ha consolidado el ambiente de euforia con el que se habían despertado los mercados de renta variable. En el caso de la Bolsa española, la tendencia a comprar, respaldada por las fuertes ganancias de primera hora en Wall Street, han llevado al Ibex 35 a situarse al frente del resto de las subidas en Europa con un avance del 3,6%.

Con todas las cotizadas menos Acciona en verde, las energéticas -por segundo día consecutivo- y los bancos han copado las mayores subidas del selectivo español. Gracias al repunte de las dos últimas jornadas, el Ibex 35 ha logrado superar los 9.600 puntos (9.615) y poner tierra de por medio frente a los mínimos de junio. Como novedad, también se han colado entre los valores más alcistas de la jornada algunas industriales como Arcelor y Técnicas Reunidas, compañías vinculadas al ciclo económico, por lo que su rebote se entiende como un signo positivo para el resto de los sectores.

En el resto de plazas, las buenas noticias sobre la actividad de los servicios en EE UU y el cierre al alza en los parqués de Asia han permitido a Wall Street abrir la semana -ayer cerró por festivo- con importantes subidas. El avance de Nueva York ha llevado a los inversores a olvidar momentáneamente las dudas de las últimas jornadas sobre el riesgo de una recaída en la recesión y optar por meter su dinero en el mercado. También ha condicionado la sesión que el precio del petróleo se esté recuperando ante la perspectiva de un mayor consumo. Sin embargo, hay que recordar que la hipersensibilidad instalada en los mercados es la que motiva que, cuando haya que subir, se haga con fuerza independientemente de los datos concretos. Pero cuidado, que también ocurre lo contrario cuando toca bajar. Al cierre, Londres ha subido un 2,51%, París un 2,27% y Francfort un 2,23%. Milán, por su parte, ha ganado un 2,6%.

Volviendo a la operación del Tesoro, la confianza demostrada por los inversores al solicitar más de 13.000 millones a España, una demanda "fortísima", según el departamento que dirige Elena Salgado, permite dejar atrás el temor a eventuales problemas con la deuda soberana tras la alarma de Grecia, que tuvo que recurrir a la UE para no faltar a sus compromisos de pago.

Demanda extranjera

Además, desde Economía también destacan como positivo la diversidad geográfica de los inversores que han comprado los bonos. De ahí el ambiente de optimismo que ha despertado tras la colocación de este martes. Sin embargo, esta confianza no es gratis, ya que el Estado se ha visto obligado a abonar un interés del 4,85% por sus títulos de deuda que vencen en 2020 o 195 puntos básicos sobre el mid swap, según fuentes cercanas a la operación consultadas por Bloomberg. El precio es muy similar al de la última operación de deuda a 10 años del 17 de junio, que se paró a un tipo máximo del 4,91%, pero supera en 0,81 puntos porcentuales los precios que pagaba a mediados de mayo. Frente a estos tipos, a Alemania le basta con ofrecer un 2,59% para colocar sus bonos decenales.

A diferencia de aquellas, sin embargo, la colocación no se ha realizado mediante el habitual método de la subasta en la que el Tesoro acude directamente al mercado de deuda soberana para que los inversores interesados puedan pujar por ella. En su lugar, se ha optado por una operación sindicada con seis bancos. Esta modalidad supone que solo las entidades financieras elegidas, en este caso Santander, BBVA, Caja Madrid, Barclays, Credit Agricole y Deutsche Bank; acuden a la subasta. A continuación, son ellas las que la colocan entre inversores escogidos. La colocación sindicada, añaden desde fuentes del mercado, asegura su diversificación geográfica, al tiempo que garantiza su resultado. Eso sí, a cambio de abonar las respectivas comisiones que cobran los bancos por su papel de intermediarios.

La de este martes es la segunda operación del Tesoro en los mercados de deuda soberana después de que la agencia de calificación Moody's anunciase el pasado 30 de junio que ponía bajo vigilancia la nota de su calidad crediticia por las peores perspectivas sobre la recuperación de la economía española, lo que adelanta una rebaja de su rating. El pasado 1 de julio, España colocó 3.500 millones de euros en bonos a cinco años con un interés marginal del 3,727%, 0,14 puntos por encima al de la anterior emisión de igual denominación celebrada en mayo.

Las incertidumbres sobre las finanzas de España, que tiene el tercer mayor déficit de la eurozona, han motivado que su prima de riesgo, un indicador que mide el grado de confianza de los inversores y que se establece a partir de la diferencia entre la rentabilidad de los bonos españoles a 10 años (4,65%) y los alemanes (2,59%), de referencia por su estabilidad, se haya disparado hasta su nivel más alto desde la entrada del país en el euro. A principios de junio marcó un máximo en los 221 puntos básicos. Este martes, tras repuntar hasta los 212 a primera hora, ha moderado su avance hasta los 205 coincidiendo con la publicación del resultado de la colocación de deuda. No obstante, a última hora ha vuelto a subir (209). Asimismo, el hecho de que los tipos de los bund se hayan encarecido en la misma proporción que los españoles (5 puntos básicos) ha impedido una mayor subida.