El Santander compra las sucursales y depósitos del Bradford & Bingley por 772 millones
El Gobierno británico nacionaliza el resto de la entidad y se hace con el control de sus hipotecas. -El banco de Botín supera en la subasta al Barclays y al HSBC y crecerá hasta los 24 millones de clientes
El banco Santander ha comprado por 772 millones de euros el sector de ahorros y la red de sucursales de la entidad británica especializada en préstamos Bradford & Bingley, que el gobierno británico ha nacionalizado para evitar la caída del octavo banco del país, según ha confirmado a primera hora el Ministerio de Economía a través de un comunicado y ha ratificado la entidad española a la CNMV. Fuentes del banco han asegurado que la cifra se pagará en efectivo.
La nota afirma que el Santander, propietario del Abbey y en proceso de completar la adquisición del Alliance & Leicester para fusionar ambas entidades, comprará unos depósitos valorados en unos 22.000 millones de libras (unos 27.280 millones de euros), correspondientes a 2,5 millones de ahorradores. El banco español, que ha superado en la subasta de estos activos al Barclays y al HSBC, también adquirirá las 197 sucursales y 141 agencias, puntos de distribución en locales de terceros, que el B&B, tiene en el país. En total, la entidad presidida por Botín pagará 612 millones de libras (unos 772 millones en euros) por todo el paquete, incluyendo la transferencia de 208 millones de libras (más de 260 millones de euros) provenientes de compañías offshore -que tienen su negocio fuera del país-.
"El negocio minorista del banco, es decir los ahorros y las sucursales, ha sido vendido al Abbey, propiedad del Santander, que es uno de los mayores bancos de Europa", resume el ministro de Economía Alistair Darling
El grupo presidido por Emilio Botín explica en el documento remitido a la CNMV que, cuando concluya el traspaso de los áctivos del B&B así como la operación de compra del Alliance & Leicester, el Santander contará con 1.286 oficinas en Reino Unido, incluyendo las del Abbey, "con una buena distribución geográfica" y gestionará las cuentas de 24 millones de clientes. Además, alcanzará una cuota del 10% en el mercado británico de depósitos, con lo que cumple un "objetivo muy importante" para la entidad, según
La operación se ha confirmado después de que el Gobierno de Gordon Brown anunciase que ha tomado el control de los 50.000 millones de libras (algo menos de 63.000 millones de euros) que la entidad, la mayor del país en el negocio de hipotecas buy to let -créditos a particulares para comprar viviendas que luegon van destinadas al alquiler-, gestiona en préstamos hipotecarios. Esta es la segunda nacionalización que realiza el Gobierno laborista de Brown en el último año tras la intervención del Northern Rock, lo que pone de manifiesto el alcance de la crisis financiera. De cara al futuro, Brown ha sido claro: "Seguiremos haciendo lo que sea necesario en los próximos días en momentos muy difíciles, en momentos turbulentos en todo el mundo, para asegurar el mantenimiento de la estabilidad financiera británica".
Profunda crisis
El Ministerio de Economía, que ha trabajado en este asunto de forma conjunta con la FSA -la autoridad bursátil británica- y el Banco de Inglaterra, ha justificado la medida en las turbulencias del mercado que minaron la confianza en la entidad e hicieron imposible que siguiera operando de forma independiente.
Así, el ministro de Economía, Alistair Darling, ha afirmado hoy que se tomó la decisión "rápida y decisiva" de nacionalizar el B&B para evitar que su situación afectara a todo el sistema bancario. De hecho, fuentes del Gobierno de Downing Street añaden que se han buscado soluciones privadas para la totalidad del banco, pero que al final decidió que la decisión tomada es la que mejor protege los intereses de los clientes del B&B y de los contribuyentes.
Para tranquilizar a los clientes de la entidad, que seguirá operando con total normalidad y mantendrá su nombre, según ha señalado el Santander, Darling ha destacado que "el negocio minorista del banco, es decir los ahorros y las sucursales, ha sido vendido al Abbey, propiedad del Santander, que es uno de los mayores bancos de Europa".
Los títulos de B&B, cuyas acciones fueron canceladas hoy tras una previa suspensión temporal, han caído un 90% desde el comienzo del año. El pasado día 25, el B&B anunció el despido de 370 trabajadores en un plan de ahorro y ajuste de su negocio a una menor demanda hipotecaria, lo que causó el desplome de sus títulos. Además de los despidos, el banco dispuso el cierre en el primer trimestre de 2009 de su centro de proceso de créditos hipotecarios en Borehamwood (sureste de Inglaterra), con lo que esperaba lograr unos ahorros anuales de 15 millones de libras (unos 18,9 millones de euros).
El Santander prevé un retorno de la inversión del 10% ya en 2009
Santander prevé que el retorno de la inversión de Abbey en Bradford & Bingley (B&B), que asciende a 400 millones de libras (502,15 millones de euros) excluyendo el retorno de capital de unos 200 millones de libras (251 millones de euros) en activos de compañías offshore, se sitúe en el 10% en 2009, el 15% en 2010 y el 20% en 2011.
La entidad que preside Emilio Botín estima que Bradford & Bingley aportará un beneficio neto atribuido de 40 millones de libras (50,2 millones de euros), 60 millones de libras (75,36 millones de euros) y 80 millones de libras (100,47 millones de euros) en los tres próximos años, incluyendo sinergias y otros ajustes, asumiendo que no se incorporan actividades de riesgo. Con esta operación, Abbey espera mejorar su beneficio por acción un 0,3% en 2009, un 0,4% en 2010 y un 0,6% en 2011.
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