Ryanair demandará a la Comisión por su "inactividad" ante las ayudas a Lufthansa
La aerolínea de bajo coste acusa a las autoridades alemanas de darle un trato de favor en el aeropuerto de Munich
La aerolínea irlandesa Ryanair ha dicho que demandará a la Comisión Europea por no investigar un acuerdo entre el aeropuerto de Múnich y la alemana Lufthansa. La mayor compañía aérea de bajo coste de Europa considera que Lufthansa recibe una ayuda estatal en el aeropuerto de Múnich que distorsiona la competencia y su demanda responde a la "inactividad" de la Comisión ante los hechos. Ryanair ya había anunciado en julio que demandaría a la Comisión si no tomaba medidas contra los gobiernos que daban ayudas estatales ilegales a las antiguas compañías de bandera, como Air France, Lufthansa, Alitalia y Olympic Airways.
"Lufthansa está (...) recibiendo una ayuda estatal sustancial en el aeropuerto de Múnich que distorsiona la competencia", ha declarado el consejero delegado de Ryanair, Michael O'Leary. "Ryanair se ha quedado sin otra alternativa más que retar la inactividad de la Comisión".
Bruselas ha explicado que se encuentra en juego la ayuda para la construcción de la terminal 2 del aeropuerto bávaro, en el sur de Alemania. La Comisión ha añadido que el aeropuerto y Lufthansa están involucrados en una asociación público-privada que han tratado durante dos años con las autoridades alemanas.
"La Comisión está estudiando cualquier posible ventaja dada en el contexto de una investigación sobre ayudas estatales y en la provisión y operación de la Terminal 2 del aeropuerto de Múnich", ha indicado en un comunicado. "Las pesquisas sobre este caso están ya en una fase avanzada".
Una amenza que se remonta a julio
La mayor aerolínea de bajo coste de Europa ya dijo en julio que iba a demandar a la Comisión por no tomar medidas contra los gobiernos que estaban dando ayudas estatales ilegales a las antiguas compañías de bandera, como Air France, Lufthansa, Alitalia y Olympic Airways.
La semana pasada añadió que iba a demandar a Bruselas por no enfrentarse al Gobierno francés por unas tasas reducidas que Ryanair cree que favorecen a Air France.
Además el mes pasado presentó una queja ante la comisaria de la Competencia, Kroes, en la que acusaba a Lufthansa y Air France de fijar los precios de los cargos por combustible, algo que ambas compañías rechazaron.
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