Los minoritarios piden un cauce de diálogo con Telefónica

Varios accionistas minoritarios de Telefónica han solicitado hoy un cauce de diálogo con el consejo de administración para evitar que la junta de la operadora sea un escenario de posturas demagógicas, según han indicado varias asociaciones y accionistas en sus intervenciones en la asamblea anual del grupo.

Un año más, la Junta de Telefónica ha estado marcada por un grupo de 30 ó 40 personas que se identificaron como representantes de organizaciones sindicales de la empresa, distintas a CC OO y UGT, que impidieron a los accionistas escuchar el discurso del presidente de Telefónica y abuchearon las intervenciones de los pequeños accionistas que alabaron las cuentas de resultados.

Crecimiento y retribución al accionista como objetivos

El presidente de Telefónica, César Alierta, ha recordado que su grupo se ha propuesto como objetivo "proporcionar la mayor combinación de crecimiento y retribución al accionista del sector europeo de las telecomunicaciones".

Alierta ha explicado que el crecimiento es indispensable para el éxito de su estrategia y para ello acelerará la penetración del acceso fijo y móvil y se llenarán de servicios estos accesos. El presidente de la compañía ha recordado los buenos resultados de la compañía en 2004 con 2.877,3 millones de euros de beneficio, un 30,6% más que hace un año, que en 2004 la revalorización de la acción fue de un 19,1% y que en los últimos 17 meses ocupa la primera posición por revalorización entre todas las compañías importantes del sector.

Minoritarios en pie de guerra

El turno de intervenciones comenzó con la participación del presidente de la asociación Adicae, Fernando Herrero, que calificó de lamentable que la mesa de la junta hubiera consentido los gritos que impidieron escuchar a César Alierta. Mostró su rechazo a la fusión con Terra y pidió la dimisión del presidente de Telefónica, al igual que otros dos accionistas que hablaron a continuación.

El abogado Javier Cremades habló en representación de la Asociación de Accionistas Minoritarios de Empresas Cotizadas y calificó la gestión del presidente de Telefónica de "sencillamente espectacular" y tras preguntar por el crecimiento internacional futuro pidió que le dijeran cómo se va a cumplir la obligación de que la junta se desarrolle con normalidad.

Negocios en Latinoamérica

Rainer Vermehren habló en nombre del fondo DWS, gestor de fondos del Deutsche Bank, que cuenta con el 1,7% de las acciones de Telefónica y que opera fundamentalmente en Latinoamérica. Alabó la adquisición de los activos de BellSouth en Latinoamérica y el atractivo reparto de dividendo, pero mostró su preocupación por la compra de la operadora checa Cesky Telekom en una zona con una elevada penetración tanto en red fija como en móvil.

Se mostró partidario de que Telefónica siga creciendo en los mercados en los que ya está presente, como el mexicano, y de que no siga entrando en nuevos mercados para ser la mayor empresa de telecomunicaciones.

Tras estas intervenciones, los representantes sindicales de CGT y AST se refirieron a los problemas laborales en Telefónica, momento que aprovechó un numeroso grupo de asistentes a la junta para abandonar la sala. Adolfo Jiménez, tradicional líder de la antigua Sintel, volvió a contar el conflicto y un representante de la asociación de prejubilados de Telefónica terminó el turno de intervenciones con la petición de diálogo con el grupo.

Cuentas aprobadas

César Alierta respondió en pocos minutos a las casi treinta intervenciones, entre gritos de los sindicalistas, y afirmó la disposición del grupo para colaborar con las asociaciones de pequeños accionistas. Respecto a los accionistas individuales, dijo que hay suficientes cauces de participación.También ha justificado la compra de Cesky y ha reiterado la voluntad de Telefónica de sacar a bolsa Endemol, la filial de contenidos del grupo.

Tal como estaba previsto, la junta aprobó las cuentas de Telefónica, el aumento del dividendo en un 25% hasta un mínimo de 0,50 euros por acción y el reparto de acciones propias en proporción de una acción por cada 25 que comenzará en junio.

Se autorizó asimismo la compra de acciones propias por un plazo de 18 meses y sin que exceda del 5% del capital social. También se ha aprobado la fusión por absorción de Terra, mediante intercambio de acciones de 2 de Telefónica por 9 de Terra, a la espera de la junta de la operadora de Internet del próximo día 2.