El precio medio de la vivienda creció más de un 80% entre 1999 y 2003, según el INE
Desde 1999 el coste de la vivienda ha registrado un aumento anual superior al 10%
El precio medio de la vivienda se situó en 2003 en 1.428,16 euros por metro cuadrado, cifra que supera en un 80,25% a la registrada en 1999, cuando el coste medio de los pisos alcanzaba los 792,29 euros por metro cuadrado, según datos recogidos por el Instituto Nacional de Estadística (INE) en su informe sobre indicadores sociales correspondiente a 2004.
Desde 1999, el precio de la vivienda ha venido registrando un aumento anual continuado superior en todos los casos al 10%. El mayor repunte en tasa interanual se registró en 2003, cuando el coste de los pisos creció un 17% respecto al ejercicio anterior. Este porcentaje contrasta con la variación experimentada por los salarios de los españoles, que el año pasado aumentaron un 3,8%, es decir, 4,4 veces menos que el precio medio de la vivienda.
El INE advierte al respecto que el "desmesurado" precio de la vivienda está dificultando el acceso a la misma a importantes segmentos de la población, constituyendo uno de los temas que más preocupan a la sociedad española.
Desde el punto de vista geográfico, el organismo presidido por Carmen Alcaide observa importantes diferencias entre comunidades autónomas. Así, el precio medio de la vivienda es superior a la media nacional en regiones como Madrid (2.485,08 euros por metro cuadrado), País Vasco (2.140,09 euros), Cataluña (1.850,92 euros), Baleares (1.734,66 euros) y Navarra (1.454,33 euros). En el caso de Madrid y País Vasco, el coste de los pisos sobrepasa en un 74% y en un 49,9% la media nacional.
En el resto de autonomías, los precios se encuentran por debajo de la media española. Las viviendas más baratas corresponden a Extremadura, con 615,98 euros por metro cuadrado, Castilla-La Mancha (780,17 euros), Galicia (864,11 euros) y Murcia (892,69 euros).
El INE también aprecia diferencias entre los precios de la vivienda nueva (de menos de un año de antigüedad) y los de la vivienda usada, si bien esta distancia se ha ido reduciendo en los últimos años, al pasar del 21,4% en 2002 al 18% en 2003. Ello se debe al menor crecimiento registrado por los precios de la vivienda nueva, frente a los de los pisos de segunda mano.
En el informe, el instituto constata además que los precios "no son proporcionales" a la superficie, siendo más elevado el precio por metro cuadrado de las viviendas con menos de 75 metros cuadrados que las que cuentan con entre 120 y 150 metros cuadrados, precisamente las más demandadas.
Máximo histórico del mercado hipotecario
A pesar del incremento de los precios, el INE ha indicado que la demanda de viviendas en 2003 se vio favorecida por el descenso de los tipos hipotecarios, así como por la mayor duración de los créditos concedidos por las entidades financieras. No obstante, señala que el positivo comportamiento de los mercados bursátiles y de los fondos provocaron que la inversión en activos financieros constituyera una alternativa a la inversión en vivienda, a diferencia de lo sucedido en ejercicios anteriores.
En 2003, el número de hipotecas sobre fincas urbanas ascendió a 797.861, con un aumento del 9,1% respecto al año anterior, marcando así el mercado hipotecario un máximo histórico. El importe medio de las hipotecas creció en este periodo un 12,2%, hasta los 109.198 euros. De acuerdo con los datos del INE, el número de viviendas iniciadas durante el año pasado alcanzó las 690.206, cifra que fue un 19,9% superior a de 2002 y que constituye el mayor registro de los últimos años, al sobrepasarse por primera vez las 600.000 unidades.
Las viviendas iniciadas de obra nueva aumentaron en 2003 unos 21,4%, impulsadas por el crecimiento de viviendas libres (17,6%), pero sobre todo por el de las viviendas protegidas (62,9%).
El 68% de la deuda familiar se dedica a adquisición de una vivienda
El elevado precio de la vivienda ha terminado por afectar al ahorro de las familias españolas que han visto como, en los últimos años, se ha elevado significativamente su endeudamiento, al verse obligadas a solicitar mayores créditos.
Así, según ha informado hoy la Fundación de Ayuda a la Drogadicción (FAD) con motivo de la publicación del libro de ponencias sobre el II Congreso "La Familia en la Sociedad del Siglo XXI", dos tercios de la deuda familiar actual se dedica a la adquisición de una vivienda.
Este informe indica que en los últimos treinta años la tasa de ahorro de las familias españolas se ha reducido "drásticamente", pasando de representar el 18% de la renta disponible en 1974 a un porcentaje entorno al 9% en 2002. Al mismo tiempo, el ahorro de las economías familiares en España ha experimentado cambios en su composición, y "la proporción de productos tradicionales como los depósitos ha ido perdiendo relevancia a favor de instrumentos como la renta variable y los fondos de inversión".
Otro de los aspectos más destacados del balance financiero de las familias españolas es el crecimiento del crédito, que ha aumentado un promedio de 15,6% en el periodo 1998-2003, "destacando que más de 11 puntos porcentuales de este crecimiento se explican por el crédito a la adquisición de vivienda", ha reconocido David Taguas, subdirector del servicio de estudios del BBVA.
El balance agrega que "el aumento del crédito unido a una evolución más modesta del ahorro financiero de las familias ha generado un notable crecimiento del endeudamiento", que en el año 2003 representaba más del 40% de la riqueza financiera de las familias españolas y se aproxima al 90% de su renta disponible.
Sin embargo, el elevado porcentaje de préstamos referenciados a tipos de interés variable (el 98% de ellos), "eleva la vulnerabilidad de las familias ante un cambio de orientación de la política monetaria", ha agregado Taguas, quien ha aconsejado que "la decisión de endeudarse debería tomarse en base a expectativas sobre los tipos de interés y no de acuerdo con los niveles actuales".
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.