_
_
_
_

El 'brent' supera por primera vez en su historia los 41 dólares impulsado por la crisis de Yukos

El mercado de Nueva York alcanza su quinto record consecutivo y se sitúa en los 44,40 dólares

Los precios del crudo en Londres y Nueva York han alcanzado nuevos récords históricos tras conocerse la anulación por parte del Ministerio ruso de Justicia del desbloqueo de las cuentas de Yukos, lo que ha vuelto a generar dudas sobre la capacidad de los productores de satisfacer sin interrupciones la creciente demanda mundial.

El barril de brent ha llegado por primera vez en su historia el umbral de los 41 dólares, llegando a los 41,30 dólares aunque al cierre de la sesión descendió hasta los 41. Por su parte el crudo ligero para entrega en septiembre alcanzaba en Nueva York los 44,40 dólares, ligeramente por encima del máximo de 44,34 dólares registrado durante la sesión de ayer. Se trata del quinto día consecutivo en el que el crudo de referencia en Nueva York logra récords históricos.

Más información
La OPEP producirá 30 millones de barriles para frenar la escalada de precios del crudo
Al borde del choque
Montilla alerta de que España será menos competitiva
Agricultura estudia el efecto del alza para el sector

Ayer los mercados recibieron con entusiasmo la noticia de que el ministerio de Justicia ruso había desbloqueado parte de las cuentas embargadas a Yukos para que pueda pagar el trasiego de crudo y los salarios. Pero esta misma tarde, el propio ministerio de Justicia ruso ha revocado su decisión de ayer. El ministerio ha explicado que la nota oficial cursada el miércoles a Yukos para autorizarle a financiar su actividad "no se basaba en las normas de la ley y queda revocada".

Esta situación ha devuelto la inestabilidad a los mercados, ya que la primera petrolera rusa, había expresado en días anteriores su preocupación de que, de no ser desbloqueadas sus cuentas, podría suspender el transporte de su crudo hacia el extranjero por no poder pagarlo.

Sin embargo, ésa no es la única cuestión que atemoriza a los agentes bursátiles, ya que también ven con preocupación los ataques a instalaciones petrolíferas de Arabia Saudí e Irak, y la crisis política de países productores como Venezuela y Nigeria. De hecho, las instalaciones petrolíferas iraquíes de Kirkuk que fueron atacadas hace unos días tardarán al menos un año en estar reparadas, ha reconocido hoy a un periódico europeo el ministro de Petróleo, Thamir Ghadhban.

A pesar de esta situación, los principales mercados bursátiles europeos se han salvado de las pérdidas, al cerrar justo antes de que el precio del petróleo alcanzase cifras record. A pesar de esto, han recortado parte de lo ganado a lo largo de la jornada. Así el principal índice de la Bolsa de Madrid, el Ibex 35, ha logrado mantener la cota psicológica de los 7.800 puntos al ganar en la sesión de hoy un 0,27% lo que le sitúa en los 7.836 puntos. En Europa El índice DAX de la bolsa de Fráncfort cerró hoy con ganancias del 0,14%, hasta los 3.829 puntos. Londres acabó con una ligera alza del 0,12% y París avanzó un modesto 0,43%

Si continúa en torno a los 40 dólares en los próximos meses podría restar al PIB entre 2 y 3 décimas

Los analistas coinciden en señalar que si continúa el encarecimiento del petróleo en los próximos meses podría restar entre dos y tres décimas al PIB, ya que éste se ha elaborado sobre una previsión máxima de 35 dólares el barril. Según estimaciones de la OCDE, cada diez dólares de desviación restan cinco décimas al crecimiento.

Ante la creciente escalada del precio del petróleo, el ministro de Industria, Turismo y Comercio, José Montilla, ha señalado que "debemos llevar a cabo un ahorro energético que nos permita reducir la factura que pagamos por el consumo de petróleo, dado que las perspectivas futuras no son optimistas".

La situación del precio del barril de petróleo brent por encima de los 39 dólares, tiene como consecuencia "aspectos negativos para nuestra economía y para la de los países avanzados", ha señalado Montilla, quien ha añadido que "debemos tener en cuenta que tanto nosotros como los países de la UE somos consumidores y no productores de petróleo". Para el ministro, las perspectivas "no pueden ser optimistas, ya que el consumo sigue aumentando por parte de los países emergentes, mientras que la capacidad de producción está prácticamente al límite".

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_