El temor al desabastecimiento devuelve a máximos los precios del crudo

Los precios del petróleo vuelven a superar sus niveles máximos por la preocupación generada en el mercado por la estabilidad de la producción en Rusia. Aunque Moscú retiró ayer su amenaza de suspender las ventas de Yukos, el miedo al desabastecimiento elevaba hoy el barril de 'brent' hasta rozar los 40 dólares, mientras el 'Texas' estadounidense cotiza por encima de 43 dólares.

El ministerio de Justicia ruso negó ayer que haya prohibido a las filiales de la petrolera Yukos extraer, refinar, transportar y vender crudo. El director adjunto de ese servicio, Andréi Beliakov, dijo a la agencia oficial rusa Itar-Tass que sólo se prohibieron operaciones de venta de "bienes inmuebles" de tres filiales de la compañía. Pero El temor a que Yukos pudiera dejar de suministrar petróleo justo cuando los países consumidores empiezan a almacenar para el invierno pesa más que cualquier desmentido, y tras el respiro de ayer vuelve el caos al mercado internacional.

Además de la crisis rusa, los analistas advierten de que los precios podrían dispararse aún más si se producen nuevos cambios en el panorama internacional. Además, la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP) ha manifestado recientemente su preocupación por los últimos aumentos registrados por el precio del crudo, que hicieron que la cesta de la OPEP alcanzara su nivel más alto desde la invasión de Kuwait por parte de Irak, en 1990.

"Los aumentos de precios son una razón para preocuparse cuando uno ve que el petróleo que hay en el mercado es más que suficiente y que nuestros países miembros hacen todo lo que está a su alcance para calmar los temores del mercado", señaló el gobernador de la OPEP de Indonesia, Maizar Rahman.

Rahman, quien actualmente reemplaza al ministro de Energía de Indonesia, Purnomo Yusgiantoro, como secretario general de la OPEP, también advirtió que los 11 Estados que conforman el cartel ya operan cerca del límite de sus capacidades máximas. La producción actual de la OPEP es de 29 millones de barriles diarios, unos 3,5 millones de barriles diarios más que la cuota de 25,5 millones de barriles fijada a comienzos de julio pasado.